Hoteles con aguas termales en Canfranc-Estación

El hotel se encuentra ubicado en un paraje natural rodeado entre montañas, a poco más de 2 kms del fin de población de Canfranc-Estación. La estructura del hotel es idílica, personal atento y agradable. Aunque sería recomendable realizar alguna reforma en las habitaciones, éstas son correctas, con sencilla ambientación de hotel de montaña. Hotel limpio. Los colchones de los sofás camas no son buenos, resultan incómodos, los de las camas están bien. Las almohadas están ya muy usadas y hemos tenido que solicitar más almohadas para que se amortigüe mejor la posición de la cabeza. Las cenas están muy bien elaboradas, tanto de sabor, como de cantidad y presentación de los platos, con varias elecciones y servicio de mesa. Los desayunos son normales, variados y calidad normal. No hay opción de solicitar platos recien hechos (como p.e tortillas al gusto). El spa es pequeño, sencillo pero está bien, para estar pocos usuarios a la vez. Cuando estás en la piscina ves a través de la cristalera las montañas, es un ambiente muy agradable. Ya no hay servicio de masajes (una lástima). Es un hotel de 3 estrellas, pero merecería una clasificación de 3 estrellas superior.

Si decides alojarte en Apartamentos Canfranc 3000 de Canfranc, estarás a menos de cinco minutos en coche de Estación de esquí de Candanchú y Valle del Aragón. Además, este apartamento de esquí se encuentra a 8,1 km de Parque Nacional de los Pirineos y a 7,4 km de Estación de esquí Astún.Tras un día en las pistas, diviértete con actividades recreativas como acceso directo a las pistas de esquí, entre otras.Tendrás una lavandería y un ascensor a tu disposición.Reserva una de las 8 habitaciones con cocina, frigorífico/congelador grande y horno, y disfruta de una estancia inolvidable. Entre las comodidades, se incluyen microondas y lavadora.

He tenido la oportunidad de comer en el restaurante del Hotel Canfranc Estación y ha sido una experiencia gastronómica muy gratificante. Hemos tenido la suerte de probar un menú de degustación cuya cantidad era tan copiosa que era difícil llegar a las expectativas del esfuerzo demostrado por el chef y su equipo de cocina. Una mezcla de creación y tradición que nos ha encantado. Salmorejo, bienmesave y migas acompañadas de carpaccio de pepino y huevas, aperitivo se ceviche y otras delicias pollo al curri, tartar no puedo recordarlo todo. Dentro de la variedad de postres el flan de Angelines, con una textura cremosa que te deja fuera del mundo. Os recomiendo este restaurante, no os va a dejar con ganas de nada más. Muy recomendable.