Usuario invitado
31 de enero de 2023
De entrada, me impresionaron los interiores. La entrada principal al hotel es muy bonita, sencilla y con detalles que la hacen resaltar en el entorno; ya estando aquí nos comentaron que esta entrada fue integrada a la construcción con valor histórico para el pueblo mágico. Al entrar, te recibe una terraza súper agradable con una chimenea de doble vista y el bar (El Colibrí), está justo al lado de la Recepción, para que mientras haces tu chek in puedas empezar a relajarte. Mi parte favorita es el hotel, es un estilo colonial tipo hacienda 100% mexicano con unos jardines, fuentes y banquitas que no hay manera de que no te relajen; cada detalle ha sido minuciosamente cuidado. Mi gran sorpresa fue ver literalmente árboles nativos dentro de las recámaras que fueron integrados al edificio para no cortarlos. En cuanto al servicio, agradezco muchísimo a todo el equipo de trabajo. Todos hacen un esfuerzo para que nuestra estancia fuera agradable.