Me encanta la ubicación, justo en la playa y directamente al lado del muelle del ferry. Ubicación muy tranquila también. Un poco difícil de localizar, pero los amables lugareños están ahí para ayudar.
El personal es muy amable y habla inglés como lengua materna. Nos atendieron temprano y siempre fueron muy educados. Internet es gratuito, pero la situación del aparcamiento para aquellos que tengan coche podría mejor****.
Aparte de la falta de una televisión para entretenimiento (reservé la habitación privada), el alojamiento fue agradable. La cama era mucho más cómoda que la de la mayoría de los hoteles en los que nos hospedamos, el agua estaba caliente, pero el desagüe del baño terminó llenando la habitación con un olor fétido a aguas residuales. Detener el drenaje o limpiarlo semanalmente con lejía sería de gran ayuda. Aparte de eso, sin duda me alojaría aquí de nuevo, ya que no hay nada mejor que esta ubicación por el precio :)
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