Cerro Lobo

Mi reciente estancia en el Hotel Cerro Lobo fue, lamentablemente, una experiencia que no puedo recomendar a nadie. Aunque debo admitir que el hotel tiene un encanto visual innegable, la calidad del servicio que experimenté dejó mucho que desear y empañó por completo mi estancia. Desde el inicio, enfrenté inconvenientes que impactaron negativamente mi percepción del hotel. Al recibir mi habitación, me encontré con que el baño estaba con seguro, lo que me llevó a esperar más de 30 minutos mientras el personal intentaba abrir la puerta. Cuando el dueño del hotel finalmente apareció, su actitud no fue precisamente acogedora. Al explicar que era extranjero y que estaba aquí de vacaciones, su respuesta fue que él es argentino, como si eso pudiera justificar o compensar la situación. Durante la mañana siguiente, al acudir al área de desayuno, me encontré con que estaba abarrotada. Se nos indicó que nos sentáramos en una zona nueva, y a pesar de esperar durante 20 minutos, nadie se acercó a atendernos. Fui yo quien finalmente se vio en la necesidad de preguntar por el servicio, ya que parecía que habíamos sido olvidados por completo. La decepción alcanzó su punto culminante al momento de realizar el check-out. Estaba lloviendo, por lo que solicité ayuda con las maletas para trasladarlas hacia el auto, ya que éste estaba en un primer piso y tenía que bajar unas escaleras un poco inestables y con la lluvia podía suceder algún accidente, para mi sorpresa me dijeron que no había nadie en ese momento que pudiera ayudar, su respuesta fue completamente indiferente, reflejando una falta de interés en proporcionar una experiencia positiva. En resumen, mi experiencia en el Hotel Cerro Lobo no fue en absoluto satisfactoria y, francamente, fue una de las peores que he tenido. A pesar del atractivo estético del lugar, la actitud del personal y la calidad del servicio dejaron mucho que desear. Mi recomendación es que si están considerando el Hotel Cerro Lobo para su estancia, reconsideren sus opciones y busquen alternativas que puedan brindar una experiencia mucho más placentera y acogedora.

El hotel cuenta con todas las facilidades... Tienen un parqueo amplio donde puedes dejar tu auto con toda seguridad... Las habitación son muy cómodas y tienen de todo si deseas pasar un tiempo más largo... Tienen un balcón con vista al mar desde lo alto de la montaña... Dentro de tu loft tienes un área de cocina con hornilla, lavadero, mini nevera y demás utensilios como cubiertos, ollas y platos... El aseo es muy bueno de todo el loft... En baño es amplio tienes agua caliente en la ducha y la presión del agua es muy buena para que puedas tomar tu baño... El área común tienes una piscina con la mejor vista hacia el mar y desde la cual también podrás ver los mágicos atardeceres o también desde un área con mesas en la cual puedes realizar una fogata... Tu estadía te incluye el desayuno, en el cual tienes varias opciones para elegir en mi caso elegimos bolones y tostada de aguacate los dos estuvieron muy buenos... Están cerca a las playas de de olon una playa muy tranquila o ayampe también... El servicio y atención del personal esexcelente, siempre tratando de ayudarte, tienen una muy buena predisposición incluso cuando están ocupando y pendientes de ayudarte en lo que necesites... Una recomendación en el lugar hay muchos bichitos pequeños que te dejan una picaduras un poco dolorosas así que lleva repelente y siempre ten las mallas de todas las ventanas cerradas ya que son muy pequeños y aún así pueden ingresar, incluso te diria que tengas todos los ventanales cerrados...

El lugar es hermoso para meditar en medio de la naturaleza, es paradisíaco me encantó!! lo único que no me gusto es que tienen una piscina pequeña para el uso de los huéspedes y había que hacer reservación para el uso de la misma. Y no hay conexión con la playa.