Usuario invitado
30 de junio de 2023
Sencillamente perfecto. El diseño del hotel invita a la relajación, colores, diseño, mobiliario, todo pensado al milímetro. La suite Breathe en la que nos quedamos, espectacular, completamente domótizada que incluso puedes controlar desde una application del hotel en la que puedes acceder a todos los servicios como reservar en los restaurantes o dirigirte a recepción, y con una piscina con jacuzzi de gran tamaño. Los restaurantes y el lounge bar, desde el que hay unas espectaculares vistas de la puesta de Sol, son tan agradables que no quisimos probar nada más fuera. El acceso a la playa a pocos metros. Me quedan muchísimas cosas por comentar pero forman parte de las sorpresas recibidas durante la recepción y la despedida, así que no hay que desvelarlas sino descubrirlas! Por último y lo más importante, el servicio, nuestra adorable Iliana hizo que nuestra estancia fuera algo especial y junto con el resto del equipo, desde Restaurante hasta las adorables chichas de la limpieza, hicieron que el ambiente fuera muy personalizado, tanto que fue el escenario ideal para nuestra pedida de mano :). Experiencia, entorno y servicio inmejorables.