Usuario invitado
21 de noviembre de 2022
Leyendo las reseñas me daba un poco de miedo escoger esta casa rural. Menos mal que solo hice caso de las buenas críticas y me animé a reservar. El lugar es precioso, la ubicación maravillosa para disfrutar del pueblo y sus rutas. La habitación más que correcta, con la calefacción a tope (tuvimos que dormir por encima de las mantas) una habitación amplia y con todo en orden (incluidos los famosos colchones). Es cierto que la tele era vieja y que funcionaba regular, pero no he venido al campo a ver la tele, sino a escapar de la rutina y hacer caminatas, así que, nos dio igual. El desayuno a base de tostada con mantequilla/mermelada o tomate/aceite, con un minicroisant (de bolsa, pero de agradecer) y un café con leche. Pilar, la señora que nos atendió, correctísima en todo momento. No es muy habladora, pero no podemos pretender que todo el mundo sea la alegría de la huerta. Para nosotros ha sido un fin de semana estupendo y de desconexión. Y aunque no solemos repetir en los sitios, puede que hasta me plantee volver. Un saludo Pilar