Huilo Huilo Reino Fungi

En general quiero mencionar que mi experiencia fue muy positiva, pero quiero destacar un hecho de muy mala clase que vivimos durante nuestra estadía. El lunes yo 8 estaba de cumpleaños y mi pareja llamó al restaurant para que por favor me llevaran de sorpresa un trozo de torta o pie con una vela para celebrar durante el desayuno. Del restaurant lo derivaron al concierge para autorizar esa pequeña atención y esta persona que le atendió le dijo que le iban a cargar a la habitación tal plato. El desistió de ello por considerarlo absurdo, ya que en cualquier restaurant en Chile (hasta en los de comida rápida) siempre se dispone de esa cortesía para algún festejado, situación que he vivido muchas veces. Desilusiona pensar que un hotel de la categoría y precio como es éste se caiga en un gesto tan vulgar de cobrar un trozo de pastel para alguien que celebra su cumpleaños, considerando que además era la despedida del hotel, lo que nos dejó un gusto levemente amargo tras una estadía sensacional.

Habitación: con balcón pero la encontré muy pequeña, calurosa, sin aire acondicionado aunque me conseguí un ventilador, poca iluminación. Entre el hilado de las sábanas había más de un pelo. Las pantuflas para ir a la piscina nunca llegaron. Cama cómoda. Cero lujo. Comedor: falta de aseo, en el marco de abajo del ventanal había gran cantidad de insectos muertos, restos de migas sobre la silla y bajo la mesa a la hora del desayuno. Personal. Se presenta bien peinada pero con uniforme sucio, manchado. Desayuno: variado. Comidas: demasiada demora en traer los platos. A mi compañera de mesa le salió un pelo en su comida. La ubicación , su entorno es maravilloso. Su interior con amplios espacios, novedoso, atractivo. SIN DUDA, HAY SERIAS FALLAS EN LA ADMINISTRACIÓN DEL HOTEL. En mi apreciación dudé en calificarlo de "malo" porque encuentro que si bien hay aspectos muy importantes que mejorar, no lo encuentro "malo" pero con lo observado no alcanza para ser calificado como "bueno" sobre todo si consideramos el precio que cobran. Paulina Astudillo C.

El hotel es una experiencia sin duda. Reservamos en el fungí y si bien la habitación era gigante no tenía mucha luz de día. De haber sabido hubiéramos buscado en nothofagus. Pero la habitacion superior tenía cama auxiliar para nuestro hijo pudimos instalar l cuna del bebé y sobraba espacio además de una tremenda terraza. El desayuno no es muy variado pero de calidad. Los espacios del hotel son hermosos, llama la atención si varias conexiones desocupadas o en desuso. Pero no afectan a la estadía . El personal muy cálido en general. Lamentable al llegar el tobogán fue ocupado por una persona con mucho peso para una diversión de niños lo que hizo que estuviera sin poder ser utilizado por 3 días, hubo demora en su reparación y la piscina externa no funciona. El restaurante no se demora en servir, si la carta no es barata pero lo vale, llamo mi atención la felicidad del chef de ese día al interior de la cocina. Las excursiones son hermosas todo muy protegido y guiado. Amamos a la Sra que pasaba a dejar chocolates en las noche

maravilloso entorno, con una arquitectura variada y orientada a la madera nativa natural, distintos espacios en las areas comunes, amplios y confortables, muy buena atención y comida, una experiencia espectacular desde que se ingresa al lobby del hotel, al que le guste la naturaleza no lo olvidará, tienes senderos para recorrer la reserva del Huilo Huilo

Es uno de los lugares mas lindos que he visitado, ademas de todo lo que es la Reserva, hay muchos lugares cerca de interés como rios y lagos. Perfecto para ir a relajarse, avistar aves, conocer flora nativa, hacer diferentes caminatas o excursiones, teniendo todas las comodidades.

Emocionantes experiencias para realizar en familia. Rafting lo mejor! raftingrucapillan. Canoping muy bueno también. El hotel Reino Fungi es precioso. Pudimos descansar, hacer muchas cosas fuera del hotel y comer muy rico.

Nos gustó nuestro Lodge Reino Fungi, sin embargo, habitación tenía algunos detalles en infraestructura, así como también tuvimos que cambiar nivel de habitación y pedir vista al oeste para tener vista a la naturaleza y no a otras estructuras o infraestructuras vecinas. Quiero destacar a Felipe de Taberna de Darwin; Lucas de Spa Lawenko; y todas las mujeres de Restaurante Nothofagus y de Bar Bombeyi, todas muy amables y cordiales; sin embargo, barman varón del Bar Bombeyi atiende con mala cara y poca gentileza. Además en dicha Bar es muy poca la variedad de platos para comer, no hay opciones de tablas (ejemplo: carnes, champiñones, etc) que hagan atractivo ir a comer al lugar. En cuanto al Restaurante Nothofagus, destaco la variedad y lo rico del desayuno, así como la preparación exquisita de los platos de fondos, sin embargo, la variedad es poca, extrañé el jabalí que probé hace 2 años atrás, de todos los que probé, sólo me quedé con 3. En cuanto a las chicas de recepción también aconsejaría mayor amabilidad. Referente a otras aspectos, sugiero seguir mejorando las señaléticas, ya que sólo seguir al pajarito amarillo no es suficientes, mejor tener mapas de ubicación y a donde está todo; por ejemplo, Portal Los Ciervos, sólo si quiero ir a ver los ciervos y no a los jabalí. También falta indicar la complejidad por edad o situación de discapacidad, ya que el nivel bajo no siempre incluye a niños/as o personas con situación de discapacidad. Por último indicar que en cuanto al Spa Lawnko, bastante conforme con piscina y saunas, pero en cuanto a los masajes, nos hicimos 2, y consideramos que ambas terapeutas les falta mayor técnica considerando el alto valor que tienen, además doña Gricel me acortó 2 veces el tiempo.

Llegamos un viernes en la noche. Como veníamos desde Concepción conduciendo nuestra llegada fue tarde, a eso de las 10:20pm. Veníamos con nuestra hija de 5 años y sólo con la comida del almuerzo. Luego de tener que repetir el proceso de Check in que ya habíamos hecho por internet (porque se les cayó el internet en el hotel), informan que no tienen ningún servicio de alimentación activo, es decir, tanto los café, bar o restaurant ya no tienen comida. Les solicitamos aunque sea literalmente un "pan con mantequilla" al menos para nuestra hija lo cual es rechazado. Me consta que la srta del bar hizo su mayor esfuerzo, pero la poca empatía por parte del resto del personal me llama profundamente la atención. Dudo que hayamos sido los únicos pasajeros que hayan llegado en todos estos años tarde el dia del check in. Nos facilitaron unos números de teléfono de servicios de Delivery pero ninguno de ellos estaba funcionando tampoco. No entiendo como un hotel de lujo como se jactan de decir no va a tener servicio a la habitación en estos casos. Al día siguiente cenamos en el restaurant, teníamos la reserva a las 8:30pm y comenzamos a comer pasado las 9:30pm, había menos personal y todo anduvo extraordinariamente lento. El desayuno es lo mejor, tienen gran cantidad de cosas y variedades. La ubicación está muy bien para el acceso al Spa y las piscinas temperadas. Un tema también es la calefacción de las habitaciones... parece ser muy extremista. La primera noche hizo frio y la calefacción no funcionó. Las siguientes tuvimos que dormir casi afuera de la cama porque era muy cálido el ambiente. Espero que no pase muy seguido y creo que se pueden solucionar con pequeños esfuerzos.