Usuario invitado
27 de enero de 2023
Como no pasé la noche allí, sólo puedo dar mis impresiones del comedor. Había 5 asientos de tatami para 4 personas y 2 mesas para 8 personas. Sin embargo, parece que algunos asientos se han reducido. Parece que también hay un aparcamiento. Al estar ubicado a la orilla del mar, abundan los mariscos, pero también tienen menús regulares como ramen y yakisoba. Por cierto, cuando pasamos por aquí, el jurel estaba agotado, así que pedimos el menú fijo de estofado de kinme. Entonces, quedé tan atrapado en la comida que olvidé tomar fotografías. Era caro, pero creo que valió la pena. El sabor del arroz blanco fue excelente y la comida avanzó. También disponemos de menús de colaboración con determinadas "obras locales". Hay un número limitado de ellos y parece picante (no me gusta), pero si quieres probar Fallen Heaven, ¡pruébalo!
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