Usuario invitado
13 de agosto de 2021
Desde el momento que llegamos, hemos estado como en casa, empezando por la propietaria Tanya que hizo de nuestra estancia en Nerja que fuera de 10. Nos explicó las playas, restaurantes y bares dónde poder ir ( hemos ido a todos y en algunos hasta repetimos ), sitios donde podíamos salir a correr….cada día mostraba interés por nuestro bienestar al igual que su ayudante, una señora muy amable y simpática con la que también tuvimos nuestras charlas….hoy es nuestra última noche y no nos queremos ir, jajaja. Nerja es precioso y uno de nuestros lugares favoritos, pero sin duda, gracias a ellas y a las instalaciones de este hostal,porque lo tiene todo. Arriba tenéis una terraza preciosa y puesta a mimo y la habitación con el baño, creedme que mejor que un hotel de 4 estrellas. Volveremos sin dudarlo y lo recomendaremos a nuestros amigos y familiares