Usuario invitado
29 de mayo de 2023
El hotel en si es una pasada pena da por la gente que lo llevan.
Y digo eso empezando por la recepcionista que desafortunadamente nos toco durante toda la estancia,una chica que parecía no entender nada de lo que a su alrededor ocurría (el adjetivo mejor empleado sería:SEDADA) y terminando por lo mas fuerte,que es que tras acudir a los servicios “profesionales “ de los masajistas del sótano donde se ubica también un supuesto spa con hammam (jajjajajajaj) y disfrutando alavés de un masaje con mi pareja (hombre) siendo gays de forma totalmente transparente se nos proponga a ambos servicios sexuales tras finalizar semejante chapuza de masaje.
En fin,el hotel en si vale la pena pero todo ser humano encargado del buen funcionamiento en general deja mucho que desear,pero mucho.
Es mi experiencia comprendo que no a todos les haya pasado lo mismo que a mi…!