Relais Dante e Beatrice

Nuestra experiencia en este hotel ha sido correcta. A pesar de ser un edificio muy antiguo y no tener comodidades. La habitación estaba bien, la limpieza es buena. También destacar que la habitación era muy antigua i no tenía comodidades como una nevera pequeña, para guardar los alimentos i bebidas. La señora que lleva el hotel, no sabe nada de inglés, por lo que sino sabes italiano no te puedes comunicar con ella apenas. También el check-in fue un poco extraño, no cuenta con los servicios y tecnologias necesarias que debería tener un hotel. Tampoco ha sido muy agradable a la hora de tratarnos. Lo más destacable es la buena ubicación, todo lo otro es muy mejorable!

Primer día, llegamos, hacemos el check in (la chica no sabía ni mirar la fecha de nacimiento del pasaporte y preguntando si queremos desayunar por 5€ más cuando ya en la reserva estaba incluido el desayuno, para no variar tampoco hablaba nada de inglés) , nos dieron la llave y la verdad es que la habitación era enorme, el baño grande, una maravilla. Estábamos muy contentos. Lamentablemente no duró mucho, porque fuimos a visitar la ciudad y volvimos sobre las 18:30 y no podíamos acceder a la habitación ya que la chica se olvidó darnos el código para abrir la puerta de la entrada del edificio. No pasa nada pero no había manera de contactar con ellos. Hemos llamado como 7,8 veces al número que estaba en booking y en la página oficial de ellos, sin éxito. Después de más de media hora enfrente del edificio, con 5 grados fuera, Justo entró una vecina que nos abrió la puerta si no, no se que hubiéramos hecho. El desayuno no tiene nada que ver con un buffet. Tenía 3 cosas y tenías que esperar que venga la chica que te ofrezca un café y pan. Hemos esperando más de 15’ porque se estaba tomando su café (normalmente no es un problema pero cuando solo tienes un día para visitar pues cualquier minuto cuenta). Día 2, ni siquiera hemos salido de la habitación para ir a desayunar que la chica se acercó diciendo que le debemos 8€ de la tasa turística (me parece muy bien pero oye no son las formas de ni siquiera cerrar la puerta que ya se te tira encima como que le tenemos que pagar) que a todo eso fue fallo de ella porque al llegar nos ha cobrado 8€ ya de la tasa, pero tenia que cobrar 16€. (Veníamos de Pisa donde pagamos 3€ por una noche así que pesábamos que 8€ era el precio correcto para las dos noches) Por fin llegamos al desayuno donde otra vez no había nada de pan para no hablar de jamón y queso lo típico, que faltó los dos días. Después de pedir pan, nos puso dos trocitos pequeños que llevaban más de 4 días y estaban durísimos. No volvería jamás y tampoco lo recomendaría a nadie.

El lugar muy agradable, limpio y tranquilo.