Usuario invitado
14 de febrero de 2024
Antes de hoy hemos estado en otros Riad (hoteles muy pequeños), cada uno con su gracia, pero este nos ha cautivado, no solo por su arquitectura sino además, por el gran calor humano y esmerada atención. El lugar esta a las puertas de la Medina de Fez sin estar dentro de ella. Ocupa, según nos contó el propietario, el edificio de una antigua escuela, tiene ocho habitaciones. Nuestra habitación era muy amplia, limpia bien iluminada y ventilada. Las camas muy confortables. Tina y ducha y todo lo nesesario para el aseo. Una canasta de frutas nos esperaba con la advertencia de que las mismas habían sido sanitizadas. El restaurante, solo para huéspedes, cumplió las expectativas a un precio razonable. El desayuno era abundante, variado y sabroso. En fin, el hotel sobrepaso nuestras expectativas con una relación calidad precio muy aceptable.