Usuario invitado
25 de noviembre de 2021
Nos alojamos con mi esposa en Madre Tierra hace una semana. Ni bien pusimos un pie en el hotel fue como sentirnos en nuestra propia casa. Un lugar tan cálido, con detalles de muy buen gusto, ambientes amenos para disfrutar una lectura, una charla o simplemente sentarse a observar como transcurre el día. La habitación excelente, Los chicos de la recepción encantadores, muy atentos. Mariano y Daniel estuvieron constantemente atentos a nuestras necesidades y a sugerirnos lugares de paseo y de gastronomía. El desayuno estuvo excelente en cada uno de los días que nos alojamos, muy variado, con jugos naturales riquísimos. Sin ninguna duda volvería a Madre Tierra en otra oportunidad y se lo recomendaré a mis conocidos. Un párrafo especial para Mariano, en cada momento que charlamos vimos lo buen anfitrión que es, pero además nos encontramos con una muy buena persona, de buena madera. Recomiendo alojarse en Madre Tierra. Se sentirán realmente como en su propia casa.