Usuario invitado
4 de marzo de 2023
Fuimos 8 dìas en febrero con la familia, reservamos 2 habitaciones con balcones y vista al mar. El hotel tiene remodeladas las áreas comunes pero a las habitaciones les falta mantenimiento. Las làmparas del baño se ven viejas y o******s y con lo que cobran no deberìa ser asì. La mucama en 3 oportunidades se olvidò de cambiarnos las toallas de cuerpo o retiraba las usadas y no reponìa por nuevas y cuando preguntè en la recepciòn la frecuencia de cambio de las mismas me dijeron que era diaria. Para el uso de la caja fuerte tuve que pedir la llave en recepciòn. Las habitaciones cuentan algunas con microondas, vajilla, heladera, secador, aire acondicionado y otras tienen una pequeña cocina con utensilio bàsicos. El desayuno es bueno pero podrìa ser mejor, los jugos son de bidòn y tienen muchas opciones de comida màs que de desayuno. No tienen tostadoras para los panes pero si 2 sandwicheras que no alcanzan para la cantidad de huéspedes, siempre hay cola. La atenciòn del personal es buena en general. Tienen un restaurante con vista al mar pero es de una concesión con lo cual el horario a la noche es acotado, cierran a las 22 hs. La comida es buena, buenos precios y buena atenciòn. En la playa dan servicio de sombrilla, con reposeras y toallas. Siempre conseguimos lugar pero hay que ir temprano, las primeras lìneas estàn siempre ocupadas. La playa es muy linda y el hotel està cerca del centro de Bombinhas y de Bombas ya que la pasarela sobre el mar que comunica dichas playas està pegada al hotel. Lamentablemente el tiempo que nos tocò no fue el mejor, muchos dìas nublados y con lloviznas y ademàs nos agarramos el virus gastrointestinal que estaba en la zona. Por suerte, al tener las habitaciones grandes y con vista al mar pudimos pasarla bien a pesar de todo, las mismas tienen unas reposteras en el balcòn y mesa y sillas que se pueden sacar para comer afuera. Se descansa muy bien en las habitaciones frente al mar, se sube con escalera esa es la contra por el tema d ellas valijas.