Hoteles cerca del Torre Antoni Garau Simonet, Barcelona

Nuestra estancia en el Novotel Bcn City ha sido memorable en todos los sentidos. Para empezar el trato en la recepción ha sido excelente. Hemos recibido informaciones detalladas sobre los servicios del hotel y también sobre la ciudad de Barcelona con un trato muy profesional, amable y sonriente. El aroma del hall es muy agradable. La habitación reservada se corresponde a las expectativas. Habitación en la planta 17 con unas vistas impresionantes de la ciudad. La estancia está muy limpia y en buen estado y el colchón es una maravilla. El hotel tiene un pequeño gimnasio abierto 24 horas en la planta -1 con máquinas en buen estado perfectas para ponerse en forma y empezar el día con buen pie. El hotel también dispone de dos salas de Hammam privadas que son todo un lujo, ¡¡además de ser un servicio gratuito para todos los clientes que forman parte del programa ALL!! También cenamos en el restaurante del hotel, platos riquísimos (probamos el secreto ibérico, las croquetas, un wok de verduras y pollo y unas verduras a la plancha). El trato fue super simpático y agradable. La noche la acabamos en la terraza del hotel en la planta 19 tomando unas copas de vino blanco con una vista increíble de la ciudad y la torre Agbar iluminadas. Nota especial para el desayuno, extremadamente variado y buenísimo. Los camareros son muy eficaces y la sala de los desayunos es muy bonita con una isla central espectacular. Fuimos a las 10 de la mañana y no estaba muy concurrido. Hay unas máquinas sorprendentes que te preparan unos pancakes automáticamente, los niños se lo pasaban en grande observando el funcionamiento de esas máquinas. Para ser un hotel tan grande los 3 ascensores funcionaron bien y no tuvimos que esperar demasiado para subir y bajar. El check-out muy rápido y profesional.

Gran experiencia en Mercure Barcelona Cóndor. La habitación es muy amplia, el desayuno delicioso, pero lo mejor de todo es el excelente servicio y carisma que tiene cada uno de los embajadores que trabaja ahí. Te reciben siempre con una sonrisa, toman el tiempo de conocerte y hacen detalles personalizados para asegurar que tu experiencia sea única. Siempre están dispuestos a ayudarte en todo y tienen las mejores recomendaciones. Genuinamente agradezco a la jefa de recepción, Marie, por su apoyo previo y durante mi estancia. También agradezco a Nerea, Valeria y Neus por su excelente servicio en todo momento. Ellas tres están en recepción, si alguien requiere apoyo con cualquier cosa o recomendaciones pueden acerc**** a ellas ¡son las mejores! Por último agradezco a José en el restaurante de desayuno por siempre estar atento y amable con todos. ¡Sin duda regresaré pronto, gracias por todo!

La ubicación es excelente. Está justo en la calle comercial. Todos los lujos están disponibles abajo. También hay mucha comida cerca. Elegiré este hotel la próxima vez que venga. En cuanto a la seguridad, al principio pensé que era muy seguro. Tienes que pasar tu tarjeta para entrar al ascensor. La recepción también es muy amable y puedes conseguir agua mineral gratis. Descubrí que el piso superior era un bar. Había un poco de ruido. No es de extrañar que fuera tan ruidoso por la noche. Aparte de esto, todo lo demás está bien. Muy cerca de las atracciones.

Me gusta mucho el hotel en Balmes. La ubicación es súper buena. Casi todas las atracciones están a solo unos cientos de metros. Después de comprar, puedo dejar mi equipaje y seguir comprando. Un agradecimiento especial al gerente masculino de la recepción. Es guapo y simpático. Después de hacer el check out, guardamos el equipaje durante 2 días y nos fuimos a Sitges. La estación de tren está a 7 minutos andando. La ubicación es genial. Además, casi todos los restaurantes de celebridades de Internet están cerca, hay un supermercado abierto las 24 horas al otro lado de la calle y hay mucha comida deliciosa cerca. El transporte también es muy conveniente, solo toma 1 minuto bajar del autobús.

El hotel es el mejor albergue que he estado en España. La ubicación era buena y el champán de bienvenida era delicioso y la presión del agua era muy buena. Todos están muy satisfechos, excepto que fue un poco ruido porque oí el sonido en la carretera cuando estaba dormido la noche.

En todo momento nos atendieron y solventaron todo lo necesario, muy amables, muy cómodo y práctico. Tiene un servicio estupendo, está equipado con piscina, gimnasio y sauna a la disposición de los clientes, el desayuno buffet completo y tanto camareros como recepción y limpieza hacen una estancia muy agradable.

Reservado este hotel anoche porque necesitaba un estancia de 2 noches. El personal del escritorio del frente fue excelente. Guardado nuestros bolsillos antes de entrar y después de salir. Capaz de obtener un copo de hierro y un copo extra cuando fuera necesario. Cerca de muchas tiendas y restaurantes. La habitación estaba como se imaginó. Nice balcón con vistas a la carretera principal. No hay ningún sopa en el baño. De lo contrario, el baño era agradable y grande (solo ducha). No comíamos aquí, ya que había muchos lugares y restaurantes que queríamos probar.

Nos alojamos dos noches por nuestro primer aniversario en este hotel y desde el momento en que llegamos nos hicieron sentir como en casa. Reservamos una penthouse en la planta 36/37 simplemente maravillosa. Se trata de un dúplex de 150m2 aproximadamente que contaba con todas las comodidades. La distribución de la primera planta estaba formada por un salón / comedor, cocina independiente y aseo mientras que en la parte de arriba se encontraba el dormitorio con un baño completo, tocador y vestidor para cada uno. Todo el apartamento, tanto en la planta 1 como en la 2, estaba rodeado de grandes ventanales que nos permitían disfrutar de una vista panorámica a la ciudad de Barcelona, y esta fue una de las cosas que más me impresionaron, sobre todo cuando tienes la majestuosa Sagrada Familia de frente. Por la noche, cuando la ciudad estaba iluminada, era francamente espectacular, una sensación mágica tanto para tomar una copa de champagne como para descansar. El estilo de la habitación era elegante y a pesar de los años que tiene el hotel, bastante sofisticado, con mobiliario de madera tallada a mano y mármol blanco. Además, nos recibieron con un precioso detalle de bienvenida personalizado para nosotros que nos emocionó muchísimo. Para llegar a nuestro penthouse teníamos que subir en ascensor a otra planta donde se encontraba una recepción privada y conectar con otro ascensor independiente para llegar a las penthouses que se traducía en cierta privacidad y exclusividad. Tuvimos acceso a El Club, un espacio localizado en la planta 33 del hotel y que solo algunas habitaciones forman parte de él. Es un entorno en el que convergen el confort de un private lounge con vistas priveligiadas y un buffet exclusivo en el que se sirven cinco degustaciones diferentes a lo largo del día. El trato por parte de todo el personal fue exquisito. Por otra parte, también tuvimos la oportunidad de acceder al spa, localizado en la última planta del hotel y además, exclusivamente para nosotros durante 45min. Es un spa pequeño pero muy bien aprovechado, con unas vistas increíbles al puerto de Barcelona, tanto desde el jacuzzi como desde la sauna. Además, en la planta inferior hay una terraza solarium perfecta para descansar y disfrutar de las maravillosas vistas. Además, este hotel cuenta con dos piscinas y un jacuzzi. Un piscina enfocada para todos los públicos (más familiar) y otra piscina infinity muy bonita, Adults only, la cual disfrutamos muchísimo. Para completar la experiencia, comimos en el restaurante Marina Coastal Club, ubicado en la zona de las piscinas y que dispone de tres ambientes para disfrutar según la ocasión. La comida estaba espectacular. Por último, y quizás es la parte que menos me gustó, fue la del Buffet para desayunar, no tanto por la calidad del producto que podría calificar de notable (salvo la tortilla de patata) sino por el servicio. Había mucho personal joven e inexperto, perdidos en ciertos momentos y eso debería mejorar, sobre todo en un hotel

La ubicación es muy cómoda, hay señales que llevan al hotel desde la estación de Sants. Aunque el hotel está cerca de la estación, por la noche no hay ruido. Las instalaciones de la habitación están limpias y ordenadas. Se proporcionarán dos botellas de agua embotellada el día del check-in, pero no se repondrán en las noches siguientes.

El hotel está cerca de la playa y tiene una buena vista al mar, pero la arena de la playa no es lo suficientemente buena. La recepcionista de la recepción la tarde del día 16 necesita mejorar la calidad de su servicio. y después de entregarle sus tres pasaportes para registrarse, solo le dieron una habitación. La tarjeta de la habitación se reajustó después de que le explicamos que eran 2 habitaciones. Indicamos en el pedido que queríamos que fueran 2 habitaciones. juntos tanto como sea posible. Como resultado, las 2 habitaciones estaban separadas por dos pisos. Esto no cuenta. Cuando abrimos la puerta de la habitación que nos dieron, vimos servilletas sucias en el sofá que habían sido utilizadas por alguien. También había un olor acre a humo de cigarrillo. Aunque reservamos una habitación para no fumadores, enviamos a alguien a verificar y confirmamos que existían estos problemas, pero cuando preguntamos si podíamos cambiarnos a otra habitación, la recepción tuvo una muy mala respuesta. Actitud y se negó a cambiar porque estaba lleno.