Descubre Canarias: 8 islas diferentes

El Hierro es una de las islas más pequeñas de las Canarias, pero no por eso es menos sorprendente que las demás. Esta Reserva de la Bioesfera es el lugar perfecto para escapar de las aglomeraciones y sumergirte en un remanso de paz. Su tamaño reducido la hace ideal para recorrerla de punta a punta y descubrir sin prisas los tesoros ocultos que contiene. Puedes hacer una ruta de senderismo que culmine en alguno de sus innumerables miradores, como el de Izquie o el de Malpaso, darte un chapuzón en las piscinas naturales de la Maceta o en la playa de Tacorón, o perderte en pueblecitos preciosos como Pozo de las Calcosas o Isora. Hay vuelos a El Hierro desde Tenerife y Gran Canaria.

En cuanto veas la exuberante naturaleza de la Palma, rápidamente entenderás por qué se la conoce como la “Isla Bonita”. Sin desmerecer la belleza de otras islas de las Canarias, la variedad y espectacularidad de sus accidentes geográficos la convierten en una de las más hermosas del archipiélago. En sus 700 km cuadrados se concentra un universo de paisajes naturales: cascadas, barrancos, playas, montañas, bosques, volcanes… Cálzate unas buenas botas para visitar el Parque Natural de Las Nieves o el de La Caldera de Taburiente y prepárate para unas vistas inolvidables desde lo alto de sus cimas. Hay vuelos a La Palma desde Gran Canaria, Tenerife, Madrid y Bilbao (más otras rutas de temporada).

A tan solo 39 km al oeste de Tenerife, y con conexión directa en ferry, nos encontramos con La Gomera, una isla que nos permite adentrarnos en la apasionante historia y las tradiciones de las Islas Canarias. Un ejemplo de ello es el silbo gomero, un sorprendente lenguaje autóctono declarado Patrimonio de la Humanidad, pero también lo son los numerosísimos caseríos y ermitas con siglos de antigüedad que aún se conservan por toda la isla. En San Sebastián de la Gomera, la capital, puedes seguir profundizando en el fascinante pasado de esta isla con una visita a la Torre del Conde, la Casa de Colón o el Museo Arqueológico. Hay vuelos a La Gomera desde Tenerife y Gran Canaria.

La isla de Tenerife, con dos zonas; Tenerife Norte y Tenerife Sur, cuenta con una oferta turística tan ecléctica como sus paisajes. Desde el nevado Pico del Teide hasta las cálidas playas de Costa Adeje, en Tenerife encontrarás actividades para todos los gustos. Si buscas unas vacaciones activas en las que practicar senderismo, ciclismo o descenso de barrancos, en la zona norte de la isla, de carácter más verde y agreste, encontrarás algunos de los mejores entornos naturales de las Islas Canarias para hacerlo, como el Parque Rural de Anaga, los acantilados de Buenavista del Norte o pequeñas playas volcánicas como la de El Bollullo. Pero, si tus vacaciones soñadas son algo más tranquilas y prefieres tomar el sol en grandes playas de arena fina con todas las comodidades, la zona sur de la isla de Tenerife es más adecuada para ti. En localidades como Playa de las Américas o Los Cristianos encontrarás infinidad de hoteles y resorts donde disfrutar de enormes piscinas, campos de golf y tratamientos de bienestar. ¡Tú decides cómo pasar las vacaciones! Hay vuelos a Tenerife Norte y Tenerife Sur, los dos aeropuertos de la isla, desde las principales ciudades de la península y el resto de islas.

Gran Canaria es uno de los epicentros turísticos no solo de las Islas Canarias, sino de toda Europa. Cada año, millones de personas eligen pasar sus vacaciones bajo el sol infinito de ciudades como Maspalomas o Las Palmas, que cuentan con una oferta de ocio vibrante. Sin embargo, eso no ha hecho que pierda su esencia. El Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, junto con el de Tenerife, es una de las señas de identidad más auténticas de la isla, y la mayoría de los pueblos del interior, como Teror o Firgas, son ideales para conocer la calidez de su gente y probar la exquisita gastronomía isleña, que incluye quesos, vinos y, por supuesto, papas “arrugás”. Hay vuelos a Gran Canaria desde prácticamente todos los aeropuertos de la península y el resto de islas de las Canarias.

Al pensar en las Islas Canarias, a muchos se nos vienen a la mente imágenes idílicas de playas kilométricas con aguas cristalinas. Si ese es tu caso, no puedes dejar de visitar Fuerteventura en tus próximas vacaciones. En esta isla, a solo 7 km de Lanzarote, cada playa es más impresionante que la anterior, desde las más próximas a las Dunas de Corralejo, al norte de la isla, hasta las de la península de Jandía, en el extremo sur. Además, las abundantes olas y el viento permiten practicar todo tipo de deportes acuáticos, como kitesurft o windsurf. Al caer la noche, no hay mejor plan que contemplar las estrellas desde el mirador de Sicasumbre o el Observatorio de Tefía. Hay vuelos a Fuerteventura desde Barcelona, Bilbao, Málaga, Madrid, Gran Canaria y Tenerife (más otras rutas de temporada).

Sí, hemos afirmado que cada una de las Islas Canarias es única, pero te aseguramos que nunca has visto nada igual a Lanzarote. Los paisajes volcánicos de esta isla te harán creer que has viajado a otro planeta, y es que a cada paso descubrirás nuevos colores, texturas y formas que parecen de ciencia ficción. Los Jameos del Agua, el Jardín de Cactus de Guatiza o la Cueva de los verdes son solo algunos de los lugares de visita obligada en esta isla tan peculiar, sin embargo, la joya de la corona es sin duda el Parque Nacional de Timanfaya. La gran erupción de este volcán en el siglo XVII dejó un manto de lava en Lanzarote que hoy se ha convertido en un espacio natural protegido que no te puedes perder. Hay vuelos a Lanzarote desde los principales aeropuertos de la península, y desde Gran Canaria y Tenerife.

Aunque muchos aún no lo sepan, desde el 2018 la isla de La Graciosa está considerada oficialmente como la octava isla habitada de las Islas Canarias. A solo unos kilómetros al norte de Lanzarote, de la que depende administrativamente, esta isla de escasos 30 km cuadrados y poco más de 700 habitantes es perfecta para desconectar de la rutina lejos del bullicio de la ciudad. Si estás en forma, no hay nada como recorrerla a pie o en bicicleta a tu ritmo para descubrir las tranquilas playas, caletas y paisajes naturales que contiene, como la Montaña Amarilla y el parque natural del Archipiélago Chinijo. La mejor forma de llegar a la Graciosa es en ferry desde Lanzarote.