Hemos pasado nuestras vacaciones en este hotel maravilloso. Cuando llegamos,el personal de recepción fue muy amable y nos informo que nuestra habitación no estaba disponible, así que aprovechamos para ir a la playa, que pudimos ir andando ya que la teníamos a 10 minutos, ya cuando volvimos fuimos a dejar las maletas a la habitación, que para mi gusto necesita algunos retoques como por ejemplo la mampara del baño que estaba algo dejada la verdad, la habitación muy sencilla para ser un hotel tan chulo por fuera sinceramente. Recomiendo las vistas a las piscina ya que cuando sales al balcón alucinas con las vistas. Me llamó mucho la atención que un hotel de esta categoría no te cojan el equipaje y te lo lleven ellos a consigna,ni a las habitaciones, la verdad, no le dimos importancia pero nos quedamos un poco parados. Las piscinas son alucinantes, en la grande con entrada tipo playa y dos jacuzzis a los lados que son una auténtica pasada. Luego una piscinita con un barco pirata enorme con toboganes para los peques y los papis que pudimos tirarnos con ellos y disfrutar a tope muy chulo la verdad. Pero lo que más me ha llamado la atención es el fantástico equipo de animación que tiene este hotel, las chicas que llevan el Goldy club son inmejorables, Andy, Sara, Leire y Laura son una pasada. Cariñosas y cercanas con ellos, jugando y haciéndoles partícipes de todas sus actividades, se nota que disfrutan con su trabajo, el mejor equipo de animación que me he encontrado. Hacían que nuestros peques estuvieran inmensamente felices. Andy y Sara, Izan no para de hablar de vosotras 😜. Hay muchísimas actividades, mini disco, globoflexia, fiesta caribe en la piscina, fiesta de agua (donde nos reímos mucho). Acabamos reventados porque hay muuucha fiesta pero muy felices. Por la noche el club goldy está abierto hasta las 23h y mientras nosotros los papis disfrutamos de los espectáculos en la sala donde puedes disfrut**** un buen cóctel y algo para picar mientras vemos; actuaciones de circo, Malabares, acrobacias, magia... son para todos los públicos pero menos infantiles (para que nos entendamos) incluso hay juegos para nosotros de preguntas, de a ver quien aguanta más tiempo con 3 globos en el aire... Muy guay la verdad. El hotel cuenta con un bufet muy completo y con una comida riquisima, que aunque siempre estuviera lleno, el personal super amable, nos acompañaba a la mesa y estaba pendiente de todo, muy bien la verdad. El centro de Tossa y el casco antiguo,al igual que la playa, quedan a 10 minutos andando y aprovechamos una tarde para subir al castillo y disfrutar de las vistas de Tossa. Sin ninguna duda volveríamos a este hotel por lo agusto que hemos estado. No os olvidéis de visitar la planta 6 del hotel (sin niños) con piscinas de agua salada, tumbonas súper cómodas y disfrutar de la maravillosa vista de Tossa con una tranquilidad absoluta. Solo comentar lo que le pasó a mi marido una tarde que yo aproveché para conocer la zona de adultos mientr
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