Usuario invitado
10 de marzo de 2024
Alojarme en el albergue de Selina en Maderas durante una semana fue una experiencia que atesoraré durante mucho tiempo. Desde el momento en que llegué, la calidez y la amabilidad del personal eran palpables, creando una a**ósfera acogedora que me hacía sentir como en casa lejos de casa. Un aspecto que destacó fue el servicio excepcional brindado por los camareros, David y Samir. Su naturaleza acogedora y su afán por ir más allá me hicieron sentir como en familia. Su afán por hacer que todos se sintieran bienvenidos desde el momento en que entraron al albergue fue verdaderamente único. El albergue en sí cuenta con una ubicación encantadora, que ofrece una combinación de tranquilidad y aventura. Las áreas comunes siempre estuvieron limpias y bien mantenidas, fomentando un sentido de comunidad entre los huéspedes. Ya sea descansando junto a la piscina o participando en una de las muchas actividades organizadas por el albergue, nunca hubo un momento aburrido. Las habitaciones eran cómodas y estaban cuidadosamente diseñadas, lo que garantizaba un sueño reparador después de un día explorando los hermosos alrededores. El compromiso del albergue con la sostenibilidad también fue evidente en varios aspectos de su funcionamiento, alineándose con los valores de muchos viajeros de hoy. Fue increíble ver al equipo de administración conducir hasta la playa para limpiarla al atardecer. En general, mi estancia en el albergue de Selina en Maderas fue una experiencia maravillosa. El amable personal, especialmente el excelente servicio y la proximidad a la playa, lo convirtieron en un lugar al que regresaría con entusiasmo y lo recomendaría a otras personas que buscan una estadía memorable en Playa Maderas. El WiFi, el personal y el alojamiento realmente no tienen parangón en Playa Maderas y espero volver en el futuro cercano. ¡Gracias por un viaje increíble, Selinas!
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