Valoraciones de Way Hostel Madrid

Excelente servicio los chicos que traban ahí de lo mejor .

Hostal decente, pero muy concurrido. Se suponía que la habitación tenía baño privado, pero la habitación que me asignaron tenía baño afuera, lo cual era bastante incómodo. Tampoco hay ascensores. Me alojé en el primer piso, pero estaba justo al lado de la calle principal, que puede volverse bastante ruidosa.

Hay una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir, una cosa que decir.

Limpio e higiénico, recomendado.

Me gusta mucho la cocina. Es conveniente, limpia y todo el personal de servicio es bueno.

Generalmente el alojamiento está muy concurrido. La eficiencia del check-in es muy buena, pero la tarjeta de la habitación a menudo no funciona, incluso cuando el personal ayuda a cambiarla. Otros buenos, fáciles de comprobar.

La habitación está insonorizada, la cama tiene cortina, una pequeña estantería y puerto y toma de carga USB. El único inconveniente es que aunque la luz de encima de la cama esté apagada, todavía hay una fuente de luz débil. Las cerraduras tienen un costo adicional.

El transporte es conveniente y el servicio del personal es muy bueno. Hay varios supermercados grandes cerca. La estación de metro más cercana está a tres minutos a pie. Se tarda menos de 20 minutos en llegar a las principales atracciones y al Museo del Prado, así que fui al Museo del Prado tres veces. Me quedaré aquí la próxima vez.

El hotel está en una buena ubicación, a poca distancia de todos lados y el personal es muy amable. Por la mañana se proporcionan churros gratuitos.

La ubicación es buena ya que la mayoría de los lugares de interés (cuando buscas en Google “visita obligada” en Madrid) se encuentran a poca distancia. Lo malo es el ruido, ya que está situado en calles concurridas y en el teatro.

Por la mañana, los violonchelos y el café del desayuno eran gratis y la deliciosa sangría era gratis por la noche, y fue muy buena. Llegué a las 7:00 de la mañana, pero el personal masculino respondió amablemente y me dijo: "Descansa en un espacio común hasta el check-in". Me dio pena porque el espacio compartido con la cocina estaba cerrado a las 23:00 de la noche. El equipaje después del check-out era gratuito, pero había un límite hasta las 20:00. La ubicación era muy buena, era divertido caminar a pie y era una zona conveniente con supermercados y mercado local.

La ubicación está muy cerca de la estación de metro y de la farmacia. La habitación es grande y cómoda. El personal es muy amable. La barandilla de la cama es demasiado rígida y no hay espacio para guardar cosas en la cabecera de la cama.

bien. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Ha sido el mejor hostal en el que me he quedado. El lugar de por sí es excelente pero sin duda alguna el personal es lo mejor. Cuando llegamos nos hicieron sentir súper acogidas, Lucía Branca siempre fue sumamente amorosa con nosotras y muy preocupada. Además el hostal ofrece una variedad de actividades y entre ellas tour de bares donde nos tocó como guía Ale Moreno o nuestra mamá borracha como a ella le gusta llamarse. Ale fue muy cariñosa, divertida, interesante y siempre se encargó de que la pasáramos bien y estuviéramos cómodas. Fue tan genial Ale que tuvimos que volver a salir con ella un par de veces más. Por otro lado, la comidaaaaa, Gustavo Martín se lució cada vez en la cocina, se nota el cariño que le pone cuando prepara comidas y lo hace con gran vocación, quedamos enamoradas de su focaccia (que pase receta). Por último, las habitaciones eran comodísimas, las camas ofrecen una privacidad inmensa aun si estás compartiendo habitación con 8 personas y para nuestra suerte, José de la limpieza siempre dejaba todo impecable, además de ser un muy buen conversador con una vida muy interesante. Fue una experiencia única realmente y nos agradó muchísimo poder convivir con tantas personas maravillosas.