Mi experiencia en Bella Vista fue muy positiva. Según muchas de las otras reseñas, el personal merece grandes elogios: desde el momento en que llega, lo hacen sentir bienvenido y le brindan un mapa, horarios de autobuses y un vaso de agua fría si los necesita. También me ofrecieron elegir entre habitaciones y me permitieron verlas antes de decidirme. La recepción está disponible las 24 horas. Como es tan común en la vida, son las pequeñas cosas y las pequeñas muestras de bondad las que marcan la diferencia.
La ubicación del hotel es muy buena: hay restaurantes, paradas de autobús, lugares de alquiler de coches y supermercados a 50-100 m de la propiedad. La playa también está al otro lado de la calle. La zona del puerto deportivo, que también cuenta con muchos restaurantes, está a 5-10 minutos a pie.
El hotel se compone de 3 edificios: el hotel principal que está conectado al vestíbulo principal, un bloque de apartamentos tipo estudio a unos 50 m colina arriba y un segundo bloque de 4 apartamentos (el bloque Frida) que es un A 2 minutos a pie.
Me quedé en el bloque Frida, así que sólo puedo comentar sobre esto. La habitación era espaciosa y tenía un bonito balcón desde el que entraba el sol de la mañana. La cocina y el baño se actualizaron recientemente, por lo que eran modernos y funcionaban bien. Los apartamentos están ubicados en el segundo piso y son muy silenciosos: no se escucha ningún ruido de la calle cuando la puerta del balcón está cerrada.
Los desayunos son muy buenos, con una buena variedad para elegir, incluida comida tradicional griega.
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