Gran Hotel de Jaca

La comida escasa y malísima ,las sábanas manchadas de otros huéspedes,los baños muy pequeños ,las camas la mayoría supletorias pero te la cobran como camas normales los trabajadores no te solucionan nada te dan largas ,si hace frío la calefacción funciona muy mal y si encima son excursiones de niños pues ya es la pera ni caso a los niños

FIN DE SEMANA DE ESQUÍ, NOS ALOJAMOS EN EL ESTE HOTEL Y HA SIDO UN ESTANCIA MUY AGRADABLE, LA HABITACIÓN MUY CÓMODA Y LIMPIA, EL PERSONAL MUY AMABLE Y ATENTO Y EL RESTAURANTE MUY BIEN, SOLO UN PERO, LA TEMPERATURA DEL HOTEL ES MÁS BIEN TEMPLADA Y TENIENDO EN CUENTA EL FRÍO POLAR QUE HACÍA DOS O TRES GRADOS MÁS ERAN NECESARIOS.

Hotel descuidado. Baño pequeño casi no se podía entrar en la ducha.El buffet de la comida 20€ Comida escasa y fría. Personal poco amable y con excusa colaboración. Como positivo la ubicación. El pueblo de Jaca muy bonito

Trato del personal de recepción y del restaurante muy desagradable. La calefacción puesta solo a ratos estando en noviembre y con frío en el exterior. Cobran 20€ por un bufet escaso, malo y la comida está fría. Habitaciones con radiadores desconchados y oxidados y el hotel está viejo. En definitiva, una experiencia para no volver jamás.

La semana pasada estuve alojada en este hotel y lo único positivo que le he encontrado es la buena ubicación. Los ascensores son tan pequeños que sólo caben dos personas y una maleta grande. Al salir de él con la maleta en la primera planta, casi acabo en el suelo, dado que había un desnivel como de un escalón, sin estar debidamente indicado. La habitación, sin papelera, sin nevera y con las puertas de los armarios envejecidas, que se abrían con mucha dificultad y ruido. El baño muy pequeño, con el radiador oxidado por múltiples sitios y una ridícula estantería en la que no cabía prácticamente nada; azulejos y suelo desgastados o sucios (no lo tengo claro, ya que parecía más bien lo segundo). El día que llegué, la calefacción estaba apagada a las 15h de la tarde y al preguntar en recepción informaron que sólo se encendía ciertas horas por la tarde, dado que el coste de la misma para un edifico tan grande era elevado. Respecto al restaurante, un desastre absoluto. Algunos días, el mismo menú para comer y cenar, comida fría y de mala calidad, incluso ciertos alimentos en mal estado; pescado a medias de cocinar; hubo un día en el que pagué 20 euros por comer y sin apenas opción a elegir un primero y un segundo porque no les quedaba comida. Respecto al trato recibido por parte del personal del restaurante, en general, poco adecuado. En algunas ocasiones retiraban los platos sin haber terminado de comer y sin preguntar si podían llevárselos; malas formas al dirigirse al cliente, llegando incluso a faltar el respeto en una ocasión. Tengo claro que no volveré más a este hotel.

Cuatro días en el hotel. El horario de la calefacción: 7-8 h, 16-17 h y 20-21h. El resto del día apagada. En la habitación ambiente glacial. En la calle Mayor 6°C, la Peña Oroel con nieve. Ante las reclamaciones en recepción falsedades: "está encedida" (falso, el radiador frío), "es que los clientes dicen que si la encendemos más tiempo no pueden dormir por el calor excesivo" ... Nos fuimos a otro hotel. Una experiencia imborrable por mala. Ahorran costes jugando con la salud de los clientes.

Personal amable, muy limpio, buen desayuno. Echamos en falta un bar para tomar un café dentro del hotel, cerca de la zona de relax y mesas. Sólo habían máquinas expendedoras.

Cerca de todo, de la carretera para salir y de los lugares interesantes que visitar. Aunque tienen parking, se puede aparcar alrededor sin coste. Cualquier incidencia te la solventan rápidamente. Habría que hacer algunas reformas pero en general es bastante aceptable y para estar unos días en Jaca cumple todas las expectativas