Usuario invitado
27 de febrero de 2023
Fantástico hotel, bien situado a 7 km de Cáceres, antigua Residencia de la Familia Golfín. Edificio bien conservado. Habitaciones confortables, tranquilidad absoluta, en la Junior Suite (209) no se escuchaba ni un ruido. Sólo una sugerencia, el tamaño de la cama era de 1,35 cm, para un hotel de 5 estrellas y con el espacio que hay se puede poner una cama de 1,80cm. Por lo demás todo perfecto. Gastronomía deliciosa, el desayuno muy completo, zumo de naranja natural, platos calientes, bollería muy rica, etc. y en la cafetería los platos muy buenos, personal muy amable. El Spa estupendo, escogimos una hora en la que estuvimos sin gente. Circuito Termal muy completo y relajante. Los alrededores del hotel están muy cuidados. Tiene Parking exterior y el subterráneo (con coste). Piscina exterior, Ermita, huerto, Olivos centenarios, hay un humedal donde ves las cigüeñas que anidan en los postes al lado del hotel, vacas pastando...Una experiencia de lujo en el entorno rural extremeño.