hostales en Río Grande del Norte, Brasil

Estuvimos hospedados en Pousada Xamã por 2 semanas en Febrero/Marzo y la experiencia fue inolvidable. El check-in fue super rápido a cargo de Jack, que habla ingles y portugués (y algo de español) que ademas de ser muy amigable, dá buenos consejos para conocer playas y restaurantes. En términos generales todo el personal es muy atento y cordial. Toda la pousada está rodeada de vegetación, plantas, flores y la verdad que la experiencia de estar rodeado de tanto verde es muy lindo, y entre medio de todo está la piscina que en nuestra estadía estuvo limpia. Se usa en un horario de 9hs a 22hs lo cual tiene sentido porque hay habitaciones en los alrededores y la idea es conservar la paz del lugar. Nosotros estuvimos en la habitación deluxe que es espaciosa, con un balcón enorme, la cama era realmente gigante y el baño super cómodo con una gran ducha. No tiene placard pero si tiene un buen espacio para guardado de ropa. Quiero destacar el servicio de habitación que es excelente, donde todos los días limpiaron la habitación, repusieron papel, toallas, jabones sin tener que decirles nada. El desayuno es muy completo, con variedad de panes, jugos, y distintos tipos de alimentos. Quiero destacar que todas las mañanas Neusa está en la cocina y te ofrece un rico queso a la plancha que realmente hizo la diferencia en mis desayunos. No quiero dejar de mencionar el tema de las reglas que tiene la Posada. Todos los hoteles tienen reglas de convivencia, y también de limpieza, que si bien pueden parecer rigurosas, tienen un porque y es el de conservar la limpieza y el orden del lugar. La posada está a poca distancia del centro que se llega caminando en 7 minutos. En los alrededores de la posada hay tiendas, restaurantes, cafes y hasta barberías. Si un día no querés caminar mucho, los alrededores tienen de todo. Por ultimo, Neusa y Antonio (los van a ver todo el tiempo en la posada) son muy amables y simpáticos. Se nota cuando la gente es dedicada en lo que hace y cuanto amor y cariño le ponen a la Pousada. Fueron unas inolvidables vacaciones ❤️

Estuvimos hospedados en Pousada Xamã por 2 semanas en Febrero/Marzo y la experiencia fue inolvidable. El check-in fue super rápido a cargo de Jack, que habla ingles y portugués (y algo de español) que ademas de ser muy amigable, dá buenos consejos para conocer playas y restaurantes. En términos generales todo el personal es muy atento y cordial. Toda la pousada está rodeada de vegetación, plantas, flores y la verdad que la experiencia de estar rodeado de tanto verde es muy lindo, y entre medio de todo está la piscina que en nuestra estadía estuvo limpia. Se usa en un horario de 9hs a 22hs lo cual tiene sentido porque hay habitaciones en los alrededores y la idea es conservar la paz del lugar. Nosotros estuvimos en la habitación deluxe que es espaciosa, con un balcón enorme, la cama era realmente gigante y el baño super cómodo con una gran ducha. No tiene placard pero si tiene un buen espacio para guardado de ropa. Quiero destacar el servicio de habitación que es excelente, donde todos los días limpiaron la habitación, repusieron papel, toallas, jabones sin tener que decirles nada. El desayuno es muy completo, con variedad de panes, jugos, y distintos tipos de alimentos. Quiero destacar que todas las mañanas Neusa está en la cocina y te ofrece un rico queso a la plancha que realmente hizo la diferencia en mis desayunos. No quiero dejar de mencionar el tema de las reglas que tiene la Posada. Todos los hoteles tienen reglas de convivencia, y también de limpieza, que si bien pueden parecer rigurosas, tienen un porque y es el de conservar la limpieza y el orden del lugar. La posada está a poca distancia del centro que se llega caminando en 7 minutos. En los alrededores de la posada hay tiendas, restaurantes, cafes y hasta barberías. Si un día no querés caminar mucho, los alrededores tienen de todo. Por ultimo, Neusa y Antonio (los van a ver todo el tiempo en la posada) son muy amables y simpáticos. Se nota cuando la gente es dedicada en lo que hace y cuanto amor y cariño le ponen a la Pousada. Fueron unas inolvidables vacaciones ❤️

Estuvimos hospedados en Pousada Xamã por 2 semanas en Febrero/Marzo y la experiencia fue inolvidable. El check-in fue super rápido a cargo de Jack, que habla ingles y portugués (y algo de español) que ademas de ser muy amigable, dá buenos consejos para conocer playas y restaurantes. En términos generales todo el personal es muy atento y cordial. Toda la pousada está rodeada de vegetación, plantas, flores y la verdad que la experiencia de estar rodeado de tanto verde es muy lindo, y entre medio de todo está la piscina que en nuestra estadía estuvo limpia. Se usa en un horario de 9hs a 22hs lo cual tiene sentido porque hay habitaciones en los alrededores y la idea es conservar la paz del lugar. Nosotros estuvimos en la habitación deluxe que es espaciosa, con un balcón enorme, la cama era realmente gigante y el baño super cómodo con una gran ducha. No tiene placard pero si tiene un buen espacio para guardado de ropa. Quiero destacar el servicio de habitación que es excelente, donde todos los días limpiaron la habitación, repusieron papel, toallas, jabones sin tener que decirles nada. El desayuno es muy completo, con variedad de panes, jugos, y distintos tipos de alimentos. Quiero destacar que todas las mañanas Neusa está en la cocina y te ofrece un rico queso a la plancha que realmente hizo la diferencia en mis desayunos. No quiero dejar de mencionar el tema de las reglas que tiene la Posada. Todos los hoteles tienen reglas de convivencia, y también de limpieza, que si bien pueden parecer rigurosas, tienen un porque y es el de conservar la limpieza y el orden del lugar. La posada está a poca distancia del centro que se llega caminando en 7 minutos. En los alrededores de la posada hay tiendas, restaurantes, cafes y hasta barberías. Si un día no querés caminar mucho, los alrededores tienen de todo. Por ultimo, Neusa y Antonio (los van a ver todo el tiempo en la posada) son muy amables y simpáticos. Se nota cuando la gente es dedicada en lo que hace y cuanto amor y cariño le ponen a la Pousada. Fueron unas inolvidables vacaciones ❤️