Al pie de la montaña Dinghu, está a solo cinco minutos a pie. Es muy adecuado para aparcar el coche, ir a la montaña por tu cuenta, y puedes lavarte y descansar cuando estés cansado. Ya no sufrirá la fatiga de encontrar una plaza de aparcamiento y conducir. El hotel ha sido renovado junto con el restaurante Ronghua de al lado. Aunque el estilo no es simple y moderno, todavía se ha renovado recientemente. Se siente más cómodo e higiénico vivir. El hotel ha preparado algunos artículos desechables para el consumo para recordar a los niños, de lo contrario es fácil desmontarlos por error y llevar al consumo. No hay desayuno, pero puede agregar 20 yuanes por uno, pedir el menú del restaurante. Comemos el té de la mañana directamente. El producto está bien, estilo típico cantonés, grande y grande, en el cuarto piso, con habitaciones privadas, pero los niños también quieren té. Hay muchas papillas y están hechas con arroz del noreste, que es diferente de las distintas papillas en Guangzhou que están completamente trituradas. Prefiero este tipo de papilla. El precio es razonable después de leer el menú.
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