Usuario invitado
16 de julio de 2021
Este es un hotel que valora más a sus empleados que a sus huéspedes. El desayuno termina a las 8:30. Si viene a dormir tarde, lamento que tenga hambre, porque los empleados tienen que comer después de las 8:30. Pedí pescado por la noche. Fueron casi tres gatos. No comí hasta 168 en el lago Dajiu. No comí panza de pescado ni burbujas de pescado. No sé adónde fui. La habitación está limpia e higiénica, y en el lavabo hay grandes toallas de papel higiénico. La cama es muy alta y no se puede unir. No dormí bien en toda la noche y el aire acondicionado estaba completamente frío y era ruidoso. El agua caliente del baño estaba muy mal ajustada y no había una temperatura adecuada. Hacía frío o calor. Después de lavarme la cara, las toallas de papel higiénico estaban mojadas.
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