Usuario invitado
3 de mayo de 2023
Me alojé por 2 noches para el Takayama matsuri, por lo que los precios obviamente no eran tarifas de ganga. Quería experimentar un ryokan tradicional, y el Futarishizuka definitivamente cumple con los requisitos: dormir en un futón (sorprendentemente cómodo) en un piso de tatami, puertas corredizas de pantalla. El hotel está un poco cansado, p. los accesorios, como el lavabo/tocador de mi habitación, definitivamente mostraban su edad. El dormitorio principal con tatami tenía una silla japonesa baja (sentado en el suelo con respaldo) y una mesa baja junto al televisor, y la habitación más pequeña con un pequeño armario y un tocador también tenía un par de sillas y una mesa occidentales, y hermosas vistas sobre el ciudad. Había un hervidor de agua, una tetera (té verde pero no hojicha y una galleta) y TV en la habitación. Mi habitación también tenía un baño separado (technotoilet japonés) y un pequeño baño con bañera que no usé porque prefería la experiencia onsen. Me alegró mucho la chaqueta acolchada que me proporcionaron junto con el yukata de algodón, ya que hacía un poco de frío la primera noche y cuando bajé a desayunar a la mañana siguiente. (Más invitados en el desayuno usaban yukatas que ropa de todos los días). Desayuné en el ryokan pero no cené. El primer día el desayuno era muy japonés (pescado a la plancha, verduras variadas, encurtidos, arroz, miso, un huevo (frío pero no totalmente crudo, la clara era blanca) con el que no sabía qué hacer, así que lo mezclé con mi arroz) más algo de fruta. No estoy seguro de si los frijoles marrones en goo eran el infame natto (el elemento de comida de desayuno japonés divisivo "Marmite") ya que el sabor no era tan fuerte. Hay una máquina de café en el vestíbulo, así como té que se sirve con el desayuno. El segundo día, el desayuno fue más fusión: un plato con tofu hirviendo a fuego lento en caldo, otro con más jamón al estilo occidental, huevo frito y un par de trozos de salchicha tipo salchicha, además de varias ensaladas, arroz y té. No pude experimentar el onsen al aire libre, solo el interior. (Intercambian la cortina noren roja (damas) y azul (hombres) entre las 2 entradas de vestuarios, una para interior y otra para exterior). El onsen interior tiene 2 "baños de olla" que tenían una temperatura agradable y cuadrada (un poco caliente para mí). El hotel está en lo alto de una colina empinada, pero ofrecen un servicio de minibús de enlace desde y hacia la estación para los huéspedes. Recomiendo llevar un antifaz para dormir (el que viene en el kit de amenidades del avión) ya que se hizo bastante claro bastante temprano (no hay cortinas opacas modernas y pesadas en la habitación). No espere un hotel boutique de diseño moderno, pero disfrute del sabor de la hospitalidad tradicional japonesa.
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