Ras Al Jinz Turtle Reserve

Experiencia inolvidable! Nos alojamos en las tiendas que llaman Luxury Eco Tent, que tienen una ubicación espectacular, rodeadas de naturaleza. Las tiendas por dentro son amplias y muy cómodas. Si es posible, recomendable llevar lo necesario para hacer tu propia barbacoa, lo mejor es preguntar con antelación si dispondrán de barbacoa. La experiencia de la excursión a la playa para ver tortugas depende mucho de la temporada en la que vayas, nosotros fuimos en temporada baja y aún así vimos una tortuga poniendo huevos, así como una recién nacida yendo hacia el mar. Puede dar algo de pena ver a tanta gente acercándose a la tortuga en ese momento, pero es la única manera si lo que quieres es ver a la tortuga, y en la reserva lo tratan de organizar lo mejor posible. La playa está muy protegida y ponen mucho cuidad en preservar el entorno. Mereció mucho la pena.

Me decepcionó bastante. El chico de recepción fue bastante áspero, algo inusual en Omán cuya gente suele ser tremendamente amable. El hotel no tiene ascensor y nadie hace lo más mínimo por ayudarte con las maletas. Todo está bastante viejuno y con un estado de mantenimiento pésimo. La cama está muy batallada, las sábanas gastadas, el baño cutre y las toallas viejas. La ducha tenía una alfombra de plástico y una cortina también de plástico que no llegaba al suelo, lo que hacía que cada vez que te duchabas el suelo se convirtiese en un pantano. Desayuno un bufet muy básico. No volvería

Esta es una de las mejores experiencias que he vivido en ambientes naturales. Tuve la fortuna de poder ver una pequeña (muy pequeña) tortuga que acababa de salir de la arena e iba en camino a su nueva vida en el mar. Posteriormente vi una gran tortuga verde desovando. Es una visita guiada, no se puede caminar “solo” por la playa, ya que es una reserva natural. Las visitas a la playa comienzan a las 8:30 PM, y van en grupos de 25 personas, pero se llena muy rápido. Les recomiendo llegar a las 7:30 PM para poder estar en los primeros grupos, ya que debido a la cantidad de gente a veces las tortugas se asustan y no desovan y regresan al mar. A pesar de que los guías explican claramente que no se pueden tomar fotos con flash, ni que se pueden acercar a la parte de adelante de la tortuga, siempre hay algún despistado que lo hace y eso asusta a las tortugas. Entonces paciencia. El tiquete cuesta 8 Rial para extranjeros. Creo que los grupos deberían ser mas pequeños, ya que controlar a 25 personas (incluyendo niños), es muy difícil. El guía me contó qué hay noches que reciben hasta 1000 personas por noche.