Hoteles en Santander, España

dos noches en pareja en este hotel donde encontramos lo que esperábamos por las críticas que habíamos visto. buena relación calidad-precio, registro de entrada y salida rápido y fácil, recepcionista amable, limpieza y mobiliario satisfactorios, el lavabo del baño es un poco pequeño pero nada grave, necesita un automóvil pero el estacionamiento no es un problema. el centro de la ciudad está a cinco minutos en coche. no hay minibar en la habitación y solo una máquina expendedora en la entrada

Dejamos atrás Bilbao y las maravillas del País Vasco para arribar a Santander. La elección del Hotel Bahía fue muy acertada.! Ya nos impactó la ubicación, sobre el paseo marítimo, en la vecindad de un parque estupendo y casi enfrente del Centro Botín. Es un hotel de amplias instalaciones, con una magnífica recepción que permite, a través de sus amplias ventanas, visualizar el exterior y conectar con su sector de Bar y restaurante. Muy cálida bienvenida por parte de los funcionarios de recepción quienes nos ubicaron en la habitación 726, Muy buena habitación, con todo lo necesario para un buen descanso e higiene. Que decir sino elogios para el desayuno con diversidad de excelentes productos. Si bien fueron solo 2 días que estuvimos, nos resultó muy placentero.

Estructura muy nueva (abierto a finales de julio de 2022) en la zona periférica cerca de las trayectorias tangenciales de Santander. Espacios comunes amplios, coloridos y muy agradables, personal amable y acogedor aunque la edad más joven en alguna ocasión traiciona la poca experiencia. Habitación no muy espaciosa y bastante esencial con la búsqueda, tanto escenografía como incómoda, de la ducha en el centro de la habitación y sólo el baño en un espacio muy pequeño separado. Al ir al baño, usted puede experimentar la misma experiencia de los astronautas en una Soyuz. Buena insonorización pero algunas sirenas a veces se siente. El descanso fue perfecto y también las camas fueron cómodas. Fue difícil encontrarlo a pesar de google: la entrada está en una vía secundaria donde no hay un cartel; simplemente añadir una indicación para señalar la entrada. Hemos hecho tres giros (de tangencial y santo navegador! ) antes de saber dónde estaba la entrada. A dos pasos también hay un autobús parada. Aparcamiento privado gratuito alrededor y bajo la estructura pero no sé si hay espacio suficiente para todos los huéspedes. Air acondicionado muy problemático: hay termóstatos en la habitación pero no funcionan o no están habilitados, así que el aire se maneja habitación x habitación desde un panel a la recepción que tuvimos que pedir tres veces para acceder, Luego bajarla y finalmente apagarla x noche porque ruido y molesto dadas las dimensiones reducidas de la habitación. Muy negativo No hemos probado el desayuno pero todo en resumen nos pareció un buen punto de referencia para un parada&go cerca del aeropuerto donde realmente no hay muchas alternativas a Santander mientras que no le aconsejaría a quién visita la ciudad. Claro que la gestión joven tiene puntos de mejora pero la estructura es de buen nivel

Situación inmejorable. Buena zona para aparcar. El personal de recepción muy atento. La habitación muy amplia y acogedora, y muy muy limpia. Hotel muy tranquilo, nada de ruidos del exterior ni en los pasillos. Muy recomendable para una estancia en Santander.

Me gustó: Ubicación y el magnifico edificio. No me gustó: aunque las habitaciones están decoradas con mucho gusto, prima el diseño sobre el confort. Concretamente la hab. 211, con cama redonda, no es especialmente cómoda. No tiene mesillas de noche (como se puede ver en las fotos), sobre el cabecero queda una repisa suficientemente alta, para que te tengas que levantar a coger el vaso de agua o lo que necesites. Carece de una luz de lectura, ni en la cama ni junto al ”sillón” (que es un puff grande con cojines). Pedí en recepción una lampara y la poca disposición de la persona encargada -o su incapacidad para resolver una incidencia- hicieron que tuviera que leer con la linterna del móvil. Las zonas exteriores se ven descuidadas en algunos puntos. El buffet del desayuno, no está mal en cuanto a surtido, pero es claramente mejorable en calidad (jamón de york tipo fiambre y bollería industrial) Tampoco hay variedad de panes, espelta, centeno, etc. En compensación la persona que atiende el buffet es eficiente y dispuesta a ayudar.

Hemos estado 10 días y todo muy bien como siempre, es la tercera vez que vamos. Habitaciones muy limpias. Cama cómoda, mucho espacio para guardar tus cosas. Al llegar tienen un detalle te regalan unos bombones y unas zapatillas. Las habitaciones estan muy bien insonorizadas. Personal de cafetería muy amable, tienen algunos platos para una cena ligera si nonte apetece salir a cenar fuera, el único pero es el horario de la cafetería. No abren hasta las 10:30 que es cuando cierra el bufet del desayuno, y los que no tenemos bufet tenemos que salir a desayunar todos los días fuera, hubiese sido mas cómodo desayunar dentro del hotel.

Un nuevo hotel de referencia en Santander. Hasta ahora me he alojado siempre en el H. Hoyuela o en el H. Gran Sardinero en mis desplazamientos a la ciudad de Santander. Me gusta la zona, el paisaje, la tranquilidad, etc., pero en esta ocasión no pudo ser y me decanté por el Silken Coliseum. Fenomenal y un auténtico acierto. Ha sido una magnífica experiencia y un nuevo hotel de referencia en el centro de la capital cántabra. El personal de recepción muy amable; la habitación amplia y limpia; el bufet del desayuno de diez, y si te decides por comer en el propio hotel un menú de fin de semana, igualmente, genial. Poco más que añadir salvo que repetiré y muy a gusto. Mis sinceras felicitaciones al equipo del Silken C. Un abrazo.

La austeridad del edificio junto a la decoración taurina del hall y la antigüedad de las instalaciones le da un aire rancio y creo que mejoraría mucho con una reforma integral. Ubicado en una zona sin encanto, aunque cerca de la preciosa playa del sardinero. El personal transmitia cierta quemazón si bien el trato fue correcto.

Hotel muy bien ubicado. Se encuentra cerca de la zona de ambiente de Santander y de los mejores restaurantes. Además a escasos minutos está el paseo por la bahía de Santander. Buenas instalaciones, muy limpio, el personal muy atento y amable. Super recomendable. Volveremos

Un hospedaje excelente muy limpio e higiénico. Relación calidad y precio inmejorable. Amplio y confortable. Muy interesante para familias con hijos y cerca de los medios de transporte, tren y autobús.