Usuario invitado
30 de junio de 2024
Mi estadía en La Fortuna fue una verdadera decepción. Desde el momento en que llegamos, nos dimos cuenta de que no íbamos a tener la paz y tranquilidad que esperábamos. Había albañiles trabajando justo al lado de nuestra habitación, haciendo un ruido insoportable. El día siguiente, a las 7 de la mañana nos despertó el sonido de los martillazos. Además, los albañiles ponían música a alto volumen, lo que hacía imposible descansar. Los albañiles tenían vista directa a nuestra cabaña, cero privacidad. Habíamos elegido este hotel con la esperanza de relajarnos y disfrutar de unas vacaciones tranquilas, pero desafortunadamente, la experiencia fue todo lo contrario. La administración del hotel debería haber informado a los huéspedes sobre las obras en curso y tomado medidas para minimizar las molestias. La solución de ellos fue devolvernos el dinero y desalojarnos para que “no perdieran la oportunidad de alojar a otro cliente”. Fue una terrible experiencia y ciertamente no vale la pena el precio pagado.