Agroturismo Maddiola

Nos hemos alojado en los apartamentos y ha sido una estancia muy agradable. La ubicación es preciosa, rodeados de naturaleza y paz. Muy cerca encuentras un montón de animales y tienes varios caminos para hacer caminatas. Como punto importante para mejorar son las camas y las almohadas!!! Son viejas e incomodas y nos encontramos una gran mancha amarilla en nuestra cama… Es lo que ha hecho que nuestra estancia no sea del todo grata. Por lo demás, el apartamento es acogedor y tiene todo lo básico que puedas necesitar. Quisimos entrar en las zonas comunes del apartamento y nos encontramos con las puertas cerradas.. una pena.

La casa es preciosa y las vistas increíbles. Lo que no me gusto fue que los corderos y cabritos que tienen los venden para carne con 1-3 meses. Me da mucha pena que los puedas alimentar con pan, tocar y coger y los maten.

La estancia fue maravillosa, al llegar nos dieron todo tipo de instrucciones para acceder, y todo limpio y muy cómodo, vistas espectaculares , la verdad para repetir la experiencia. Empleados muy atentos .

la seguna vez que vamos.La ubicación ideal,apartado del mundo pero a un paso de todo.El Apartamento completisimo,como crítica constructiva tal vez es hora de ir cambiando el sofá 😉.Los propietarios, encantadores,amables,te explican todo lo que necesitas y se les ve gente noble. por mejorar en mi criterio subjetivo. El desayuno no cuesta lo que vale,es todo casero pero a mi que no me gusta el yogur,la tarta de queso,los kiwis….pues como que no me sale rentable,pero digo a mi,ojo. y algo más,para nada achacable a los propietarios.De los 5 días baje dos al jacuzzi.Cuál fue mi sorpresa al ver a un matrimonio,juraría que de nacionalidad francesa,paseandose y usando las instalaciones,yo los vi en la sauna pero me imagino que el jscuzzi también,totalmente desnudos …y había niños pequeños.Para mi del todo inaceptable pero no creo que sea culpa de los dueños aunque creo que debería de cuid****. en resumen,un 9 sobre 10.Yo/Nosotros volveremos seguro si podemos,es un lugar del que te enamoras por todo lo que le rodea ,propietarios incluidos. PD los dos perros,MARAVILLOSOS

Apartamento muy acogedor e iluminado. Perfecto para ir con mascotas. Para mejorar sería la limpieza, al baño le faltaba un punto más: la mampara estaba bastante sucia, y había bastante polvo. El colchón era incómodo, se notaba viejete, y las almohadas, así como sus fundas, muy mejorables. En cuanto al sofá, como recomendación, pondría una funda que pudiera lav**** entre cada estancia. He echado en falta tener disponible papel higiénico, una toalla más de lavabo, fregona, y algún producto de limpieza y aseo. Por lo demás, el entorno es precioso, los jardines, el material de la casa se ve de calidad, la intimidad, la terraza y la atención por parte de las dueñas.

Estuvimos 3 noches en plena semana de fiestas. La ubicación es ideal, porque está apartado, en un lugar super tranquilo, 0 ruidos y con vistas al mar, pero en 10-15 minutos de coche te plantas en la ciudad. Y para ver otros sitios tampoco está mal comunicado. La habitación muy bien, habitación y baño limpios, y colchón cómodo, muy importante. Lo de salir a la terraza y ver los animales una pasada. El desayuno cuestión de gustos, a nosotros nos pareció rico y variado. Las dueñas muy agradables y cercanas en todo momento, con gente así da gusto. Y además tienen unos perretes bien simpáticos. Volveremos.

Nuestra experiencia fue mixta. El apartamento, comedor y los jardines fueron lindos y cómodos. La mayoría del staff fueron simpáticos, excepto un hombre que presumimos era el dueño. Este parecía estar siempre de mal humor y bastante brusco con los niños que querían jugar con los animales, cosa que se espera en una granja. La peor parte de nuestra visita es que por lo menos uno de los perros de la casa tenia pulgas que saltaron a nuestras ropas. Yo se lo advertí al dueño pero no hizo nada. Esas pulgas nos picaron tanto a mi esposa como a mi. A ella severamente y todavia la estamos tratando. Fuera de eso, la interacción con los animales de la granja fue difícil porque había que caminar por campos llenos de excrementos (seria fácil construir caminos de piedras hacia los animales).

Fin de semana en familia. Era la primera vez que nos alojabamos aqui y la experiencia fue muy positiva. Sitio precioso, servicio e instalaciones muy bien. Cerca de Donosti. Los propietarios muy amables y serviciales. Muy recomendable. Repetiremos.

Lugar increíble. Habitaciones amplias, con terraza. Los desayunos deliciosos, todo casero. Y la amabilidad de los dueños que decir, súper simpáticos y para lo que necesites. Las vistas enamoran y se ven los atardeceres desde allí.