Hotel Reichs-Kuchenmeister

Es un hotel con muchos detalles y muy agradable a la vista, decorado a la antigua, con baños renovados, preciosos, camas cómodas. La Ubicacion es muy buena y tiene estacionamiento privado. Su desayuno es buenísimo, para comer o cenar yo sugiero conocer otros restaurantes alrededor

La ubicación del hotel es perfecta y tiene mucho encanto, se trata de un edificio antiguo en el centro de la ciudad. Nos gustó especialmente el restaurante con una cocina de calidad y una atención excelente. El desayuno correcto. La habitación muy bonita. La atención en recepción por la Sr Angela fue extremadamente amable atendiéndonos en castellano y gestionando nuestro traslado a otra ciudad. Sin duda recomendamos este hotel.

El hotel tiene una excelente ubicación en el centro del casco antiguo de Rothenburg, a 50 metros de la plaza principal y a otros 50 metros de la catedral. Si vas en auto tiene el pequeño inconveniente que el garaje está a 300 metros del hotel pero te llevan hasta el garaje en un pequeño vehículo. La habitación estaba muy bien y el baño era enorme pero el agua de la ducha se salía de la bañera y mojaba el piso. El desayuno era muy variado aunque a mi gusto faltaban algunas pastries dulces. El restaurante era excelente.El personal era muy atento y en la recepción hablaban español, Excelente wifi. Recomiendo este hotel en el que nos quedamos 3 noches.

Quería disfrutar de un buen hotel cerca del centro de la ciudad, que tuviera la mejor atención posible sin ser demasiado costoso y se logró. Además, la atención a los detalles me encantó. Definitivamente volveré.

Hotel precioso en pleno casco antiguo. Las habitaciones son grandes, tranquilas y disponen de aire acondicionado. Nosotros tuvimos 2 habitaciones en la segunda planta. El restaurante del hotel dispone de un gran terraza anexa. La carta no es muy amplia pero es variada.