Usuario invitado
12 de julio de 2022
Hotel modesto con instalaciones renovadas y muy buena ubicación. El acceso a la recepción del hotel se hace a través de unas escaleras incómodas, a las habitaciones se sube en ascensor. Nos alojamos en la habitación 406, una habitación interior con vistas a un patio, poca iluminación natural, pero bien insonorizada. La habitación era sencilla con una cama cómoda, un pequeño armario con minibar (funcionaba muy bien), caja fuerte… El baño, con jacuzzi, era sencillo y estaba renovado. El desayuno bufet, servicio de 7:30 a 11:00, era básico y sencillo, sin pretensiones, pero bien atendido (cafe, zumo, bollería, fiambre, pan...). Nosotras lo teníamos incluido en la habitación, pero de no haber sido así, no hubiéramos pagado los 9,50€ que tenía de coste. Todo el personal del hotel era simpático, agradable y cercano. El último día pudimos dejar las maletas en recepción sin coste adicional.