Usuario invitado
8 de enero de 2024
Correcto. Es un hotel antiguo en el que algunas de las habitaciones están reformadas. La que me correspondió a mí lo estaba y por ello estaba bastante bien. Quitando la tradicional moqueta delos hoteles franceses, que no me gusta, el resto bien. Amplia, con el baño reformado y una cama que sin ser espectacular, es correcta. El desayuno, discreto. Eso sí, como puntos favorables a destacar, está un parking gratuito prácticamente al lado del hotel, con plazas amplias, y algo que me gustó mucho. En una sala común, junto a la recepción, pusieron por la tarde una bandeja de pequeños croissants y napolitanas de chocolate, en un espacio en el que había una máquina en la que podías hacerte diversos tipos de café o chocolate. Todo ello con carácter gratuito.