Hotel de Nice

Hotel situado cerca del Ayuntamiento, estación de metro.

Bonito y pequeño hotel, interior encantador! Buena ubicación, barrio ruidoso pero buenas ventanas y aire acondicionado. Habitaciones pequeñas, pero está bien ir un par de noches. Buenas camas. Buen desayuno.

En general tuvimos una estancia agradable. Todo el personal fue muy amable y servicial. Las habitaciones son un poco pequeñas (pero es un hotel del siglo XIX). Sólo hay unas 20 habitaciones, por lo que se siente más como un bed and breakfast. Las duchas son muy pequeñas y el agua caliente parece acab**** bastante rápido. ¡La ubicación es genial! A poca distancia de algunos de los principales lugares turísticos. Para nosotros, este lado de París era mucho mejor que el lado cercano a la Torre Eiffel. El metro estaba a una cuadra. Hay muchos restaurantes justo al lado del hotel para elegir. Si conduce, hay un estacionamiento subterráneo justo al otro lado de la calle. Para recibir el descuento de hotel en el parking deberás dejar tu coche allí todo el tiempo. Si sales diariamente con el coche, tendrás que pagar las tarifas diarias. Si te quedas solo en París, puedes dejar fácilmente tu coche y tomar el transporte público.

Hotel antiguo pero muy bonito. La habitación era pequeña pero la cama era cómoda. El personal fue amigable y útil. La ubicación es excelente. Los restaurantes de la planta baja, en la zona del patio, eran ruidosos. Fácil de usar el Metro. El aire acondicionado funcionó muy bien.

El Hotel de Nice es una joya en el corazón de París. La ubicación en la Rue de Rivoli es increíblemente central, pero el hotel es tranquilo y silencioso. Las habitaciones son relativamente pequeñas, pero limpias y bien equipadas. El personal era amable y servicial. El desayuno (10 euros) merece la pena: deliciosos croissants y tartines servidos en un bonito comedor. Recomiendo encarecidamente este hotel para una estancia en el Marais.

This is one of my favorite hotels I have stayed in. The location is excellent - right in the heart of Le Marais and near to metro stations. The rooms are very charming and quaint and decorated in an old style format. Our immaculate corner room smelled of soap and lavender every day and had a balcony with a wonderful view. Even though we faced the busy Rue de Rivoli, it was very quiet. The beds have been described as hard, but I would say they were firm. I have slept on harder beds in Asia. We each had two excellent pillows to choose from - soft and fluffy or one that was more flat. The bathroom was very small as was the shower, so I would not advise this hotel room for people who are....."XXL". I think my wife and I are normal size, and had no problem. The shower, by the way had excellent and easily controlled water pressure. The temperature in the room was also easy to control. We were on the third floor, and took the short stairs up each day instead of the very small elevator. Again, people who are "big" and coming with lots of luggage might find this hard to navigate. I would therefore suggest another hotel, or even city. It you need the Marriot or Hilton, this hotel is definitely not for you, but, if you want a hotel with personality and a taste of French style charm, it is ideal! I loved it!

I've been staying in this hotel for over 20 years. Always a pleasure. The rooms are wonderfully decorated, clean and comfortable enough, staff is friendly and reliable. Location couldn't be better: in the Marais, close o metro lines 1 and 11.