Usuario invitado
6 de abril de 2023
El personal es muy amable y han hecho nuestra estancia muy agradable, y hablan español. Está todo muy limpio y la decoración es acogedora. Tiene ascensor. Las camas son cómodas y la ropa blanca limpia y nueva. El baño reformado, amplio para lo que es paris y con grifo termostatico. Las habitaciones tenían calefacción y aire acondicionado y la temperatura era perfecta. Está muy bien situado, puedes ir paseando a varios sitios y el metro está cerca. El desayuno merece la pena, buena calidad/precio. En general nos ha gustado mucho, hemos descansado muy bien y lo recomiendo Las habitaciones no son muy amplias, para viajar con niños puede ser un problema. A veces se escuchan ruidos de los pasillos, pero no impide descansar. Falta en la habitación una mini nevera, pero no cabe