Michael
8 de febrero de 2024
Sólo estuvimos una noche en el Mafolie, para interrumpir nuestro viaje a la calle John. Desde el principio, el personal fue fantástico, al igual que las vistas desde la piscina y algunas habitaciones. Nos recibió muy calurosamente Elizabeth en la recepción, quien en este día en particular pudo darnos la opción de elegir entre tres habitaciones, incluida una suite junior, al precio que reservamos. La propiedad está en la ladera, por lo que hay varios escalones entre varios niveles. Pero ella ayudó con nuestro equipaje. Disfruté de un hermoso baño en la piscina al final de la tarde, perfecto después del largo vuelo. El comedor está cerrado los martes, pero nos recomendó un restaurante muy pintoresco justo al final de la calle (tenga en cuenta que, si bien el paseo es de sólo 10 minutos, sería aconsejable no hacerlo en la oscuridad; el restaurante nos dio un viaje gratis de regreso a el hotel después de cenar). El desayuno estaba incluido en el hotel, en su fantástico comedor con vista al mar. ¡Este fue un desayuno caliente con servicio completo! Gran comienzo para nuestro primer día en las Islas Vírgenes Estadounidenses. ¡Definitivamente regresaríamos a este hotel!
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