Usuario invitado
14 de diciembre de 2023
Recientemente nos alojamos por 4 noches en una habitación con 2 camas tamaño queen (3 adultos). Las camas eran muy cómodas, la habitación era pequeña con solo un pequeño armario estrecho en el que ni siquiera cabían nuestros 3 abrigos de invierno, así que prepárate para vivir con la maleta. El baño tiene una ducha grande, un inodoro y un lavabo pequeño que es suficiente. La habitación tiene un aspecto moderno. También hay una nevera que es muy útil. La cafetera/tetera (tetera) es inútil (el café en bolsa es horrible), pero puedes servirte café y té todo el día abajo, en la zona del restaurante. El desayuno tenía mucho para elegir, pero el restaurante es pequeño para la cantidad de personas, por lo que a veces es difícil conseguir asiento. Puedes llevarte el desayuno a tu habitación. Por la noche se ofrece chocolate caliente con crema y todo tipo de aderezos, un gran placer después de un largo día frío. Puedes pedir comida en el hotel por la noche si no te apetece comer hamburguesas y patatas fritas todos los días. El hotel es encantador y limpio, pero está situado en una zona muy peligrosa, por lo que caminar hasta la estación te abre los ojos. El personal es muy agradable y servicial. Está a pocos pasos de la estación de metro con fácil acceso a Manhattan, etc. El hotel tiene una buena relación calidad-precio. Uber a JFK cuesta solo alrededor de 55 dólares y vale la pena tomarlo ya que el viaje en metro es largo y para 3 personas el costo es casi el mismo.
Quedamos satisfechos con nuestra estancia en este hotel.
Texto originalTraducción facilitada por Google