Hotel Termes Montbrió(Termes Montbrio Hotel & Spa)

Llegamos sábado tarde, había una buena cola para hacer el check-in pero en nada nos cogieron. Fuimos a cambiar la hora del Aquatonic para ir domingo con más tranquilidad y sin problema las chicas nos lo cambiaron. La estancia en el hotel muy tranquila y acogedora, el buffer del almuerzo tienes de todo un poco, perfecto. Nos falto probar la cena que nos hablaron muy bien, esperamos volver pronto. La habitación estaba impecable, soy maniática de los olores y olia a limpio. Tienen un jardin precioso en el que puedes pasearte tranquilamente y disfrutar de el

Una experiencia 10 en todos los sentidos. El personal amable y profesional. Las instalaciones del hotel muy bonitas, todo muy limpio, la habitación estupenda, con una zona de sofá con mesa, la cama enorme y cómoda con dos almohadas para que elijas. El restaurante del desayuno bonito, muy completo y con comida de calidad. Los jardines cuidados y preciosos, flores por todos los sitios. Acuatonic perfecto, poco masificado, con socorrista muy amable y profesional, cuevas termales y baño turco. Mucho personal, incluso de mantenimiento para que estuviera todo a la altura de sus estrellas. En fin estuvimos un fin de semana y volveremos sin duda, son vamos muy relajados, y muy satisfechos por la experiencia.

El mantenimiento en éste balneario brilla por su ausencia... Lo mejor es el desayuno. Creo que habría que quitarle dos estrellas. El spa si lo pagas que es para todo el día, por ka mañana no se puede entrar porque está ocupado por el inserso.

Estancia con grupo Immserso .El personal (cafeteria, termas, monitores, servicio limpieza) excelente. Las instalaciones necesitan mayor mantenimiento. Comida pésima en cuanto a calidad, variación y cantidad. Respuesta del Director General a nuestras quejas, lamentable.

Estuvimos este jueves y nos encantó, el trato del recepcionista fue estupendo, y la cama increíblemente cómoda y súper grande! Disfrutamos del Aquatonic y por la noche tomando algo en el bar. Tenemos muchas ganas de repetir. Marc y Natalia

Ideal para desconectar entre sus jardines y ciudar nuestro cuerpo beneficiándonos de sus aguas termales para el baño, un lujo. Rincones sorprendentes, si bien, algunos son mejorables con pequeñas acciones de mantenimiento. Su aire nostálgico y puntito decadente le otorgan su principal encanto, si buscas naturaleza y desconexión. Personal encantador.

El aquatonic tiene las picinas heladas por deficiciencias del complejo. Comentan en recepcion que por las mañanas esta algo mejor la temperatura y durante el dia va perdiendo. No hay suficientes albornoces ni personal para saber por donde ir. Hotel abanadonado y descuidado tanto en jardines, como en habitaciones. Preguntas por un responsable y comentan que te llamará al dia siguiente porque no esta en el hotel. Terrible experiencia. Infinitamente mejor los de Caldes o los de la Garriga. Aqui es tirar el dinero.

experiencia bastante mala en cuanto a la atención en recepción. Primero, de dos habitaciones solo tenían preparada una y la otra hasta las 18 de la tarde, nada. Hice cola en albornoz después del aquatònic en la recepción para que me dieran la llave, pasando vergüenza y empapada. Estaban de bastante mal humor a causa de un problema con la codificación de las llaves. Cuando me quejé lo que recibí como respuesta fueron malas caras, después de haber estado esperando un buen rato. Segundo, la experiencia de aquatònic muy mejorable. Resumiendo, pasamos frío. El agua de las piscinas grandes demasiado frías. Tercero, al irnos me dijeron que estaba pendiente la taxa turística, no es por la taxa que me quejo es por el hecho de quedar en evidència como si nos quisiéramos escaquear de pagar 3 euros, lo tendríamos que haber pagado al entrar. Y para acabar, el hotel no tiene para nada la categoría de 4 estrellas, en su día seguro que sí pero esos tiempos acabaron ahora viven de renta, todo está bastante dejado, el mantenimiento no es correcto pero caro es caro, que digo caro, una vergüenza. Lo mejor, la atención del personal del desayuno y la atención perfecta de los trabajadores y trabajadoras del aquatònic. Muy amables.

Las termas son unos edificios enclavados en un extraordinario jardín donde disfrutar de los árboles y plantas así como de varias fuentes y un estanque, los servicios en el hotel, spa y piscina son muy buenos, actualmente las instalaciones del spa son un poco deficientes. El desayuno muy completo.