Usuario invitado
4 de septiembre de 2022
Estuve dos noches en este hotel debido a un safari que hice por Masai Mara cómo luna de miel. Las instalaciones y diseño del hotel se ven antiguos, pero tiene un buen mantenimiento y la limpieza es buena en general. No está al nivel de un hotel o resort occidental, pero las habitaciones son cómodas, el mobiliario es adecuado y la limpieza es buena. Dicho esto, algún insecto siempre te encuentras por la habitación. La ubicación es excelente dentro de la reserva y además cuenta con un observatorio de hipopótamos, elefantes, cocodrilos y bufalos dentro del propio hotel, a tan solo unos metros desde la recepción. Pero lo mejor de todo fue la atención y el trato del personal del hotel, en especial del restaurante y de su responsable Judit. Fueron super amables desde que llegamos, pues necesitábamos una dieta libre de gluten y se preocuparon porque no nos faltara de nada durante desayuno, comida o cena. Incluso el chef nos realizaba un menú a medida para asegurar que la comida estaba libre de cualquier alérgeno. De diez. Y por si fuera poco, se volcaron con la celebración del cumpleaños de mi mujer, regalándonos una experiencia inolvidable durante la celebración. Volvería seguro a este hotel.