tafunas
1 de febrero de 2024
Fui a Maputo una semana por trabajo, me recomendaron este hotel. Está situado en una zona donde no hay casi nada, no tienes donde ir a cenar por la noche, por ejemplo. En cuanto al hotel, el interior del hotel es todo como prefabricado, de plástico. Las habitaciones también, el baño es una especie de cubo puesto a un lado de la habitación. Es muy básico, se encharca siempre y hay un problemas con las cañerías que hacen que la habitación huéla mal SIEMPRE, al entrar se nota un fuerte olor a cañería. He ido con otros 2 compañeros de trabajo y me han dicho que en sus habitaciones olía igual de mal. Falta luz en los cuartos, hay una iluminación malísima. No se ve para leer. Faltan luces y algún enchufe al lado de la cama. No hay sitios para reunirse con alguien, sólo el restaurante y la terraza del piso 16 que no abre por las mañanas. Faltan espacios para poder tener una entrevista o mini reunión de trabajo. Especialmente si este hotel está pensado para viajes de negocios, tienen que poner ás atención a estos aspectos. Si necesitáis planchar algo, no pidais la plancha. Está llena de óxido y me estropeó totalmente un vestido dejandolo lleno de manchas. El desayuno normalito. No tienen gran cosa. Los aramrios pequeños, y no hay cajones!!!!. No se puede guardar la ropa Mala experiencia, esperaba otra cosa de un hotel Melia , de 4 estrellas y con los tarifas precios que cobran. No ofrece nada que invite a volver a alojarse aquí. No tiene las comodidades o servicios de un hotel business y no tiene tampoco la estética, el encanto o la confortabilidad de otras opciones de alojamiento en Maputo.