Usuario invitado
22 de mayo de 2021
La habitación es grande, limpia y tranquila. Hay desayuno por la mañana y la madrugada sabe bien. Los sombreros se agregan solos. Hay dos sombreros, que son muy ricos en variedad, y hay leche de soja y papilla. Y hay un estacionamiento. Cuando estacione, el papá de seguridad le indicará que entre. A la una de la tarde, también le pregunté si quería lavar su auto. Realmente se siente como en casa. Lo único malo es que la bobina del mosquito no funciona, se estima que ha caducado, y no le presté atención. Golpea a los mosquitos durante la noche.
Texto originalTraducción facilitada por Google