Planeamos la estancia en este hotel ”de lujo”, con nuestros hijos ya crecidos, y así recordar el primer viaje a Lisboa con ellos cuando eran pequeños. Cinco días en Lisboa en lo que sobre el papel era un ”hotelazo” , nuevo, moderno y en un sitio excelente. El registro en el Hotel, era a las 2 de la tarde, llegamos sobre la 1 sabiendo que hasta las 2 no podíamos registrarnos, ahí empezaron las sorpresas, NO HAY CAFETERIA para poder esperar nuestra hora de entrada. Un 5 estrellas sin cafetería???. Dos mesitas con cuatro sillones giratorios frente al mostrador de recepción, era la única posibilidad de aguantar la hora que nos quedaba para poder registrarnos, sin posibilidad de tomar si quiera un vaso de agua ....la primera en la frente. Recuerdo: HOTEL 5 ESTRELLAS. Llega la hora de registrarnos, reserva para 5 días, perfecto, nos piden un nº de tarjeta de crédito, para garantizar el pago de los extras si los hubiere, perfecto, y a continuación, la recepcionista, nada amable por cierto, nos informa que van a cargarnos POR ANTICIPADO en la tarjeta, el importe de TODA LA ESTANCIA, !!!INCREIBLE!!!!. Nos negamos en redondo a ello ya que en nuestra reserva, no constaba tal circunstancia, pedimos ver al Director del ”5 estrellas”, y en pocos minutos se presento Tiago, educadisimo, amable y conciliador, pero no supo o no pudo, darnos, primero, explicacion de por que un hotel de esta categoría NO TENIA CAFETERIA, y después de por que había que PAGAR POR ADELANTADO, el total de toda la estancia. Habíamos ampliado dos dias mas, pensando en una estancia mas larga y asi terminar de ver algunos monumentos que nos dejamos en el viaje anterior. Visto lo cual, le comunicamos que nos pensaríamos muy en serio esta ampliación de nuestra estancia, y que queríamos ver las habitaciones antes de tomar decisión alguna. Muy amablemente nos acompañó a verlas, bien, pero justitas justitas, baño sin bidet, y no muy amplio, para ser ”de luxe”, pobre de luz eléctrica, armarios, muy justos de espacio, en fin, que le comunicamos que de momento nos quedábamos los primeros tres días, que remedio, y que nos pensaríamos la ampliación de dos mas. Desde luego nos negamos a pagar por adelantado, a lo que accedió, vendiendonos la cosa como una excepción. SIGO RECORDANDO QUE HABLAMOS DE UN 5 ESTRELLAS. Sin aparcamiento propio, sin espacio de carga y descarga de equipajes, que hay que efectuar en doble fila en medio de una calle de trafico mas que regular. Única posibilidad, aparcamiento publico a 100 metros, y sin convenio con el hotel, estuve mas de media hora para poder entrar en el aparcamiento, ya que estaba completo y la entrada era con cuenta gotas. Desayunos bien, pero sin tirar cohetes, maquina automatica de cafe (defectuosa los tres días que estuvimos), el horario muy estrecho, de 7.30 a 10.30 y como llegues un poco tarde, faltas en los manjares, un servicio agobiante que te retira los platos antes de que termines si te descuidas, en fin, lo suplen con la amabilidad y prof
Fabuloso
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