Hotel y Bodega El Lagar de Isilla(Hotel Spa El Lagar de Isilla)

Nos alojamos en la habitación estándar superior y la habitación nos encantó. La cama es enorme y muy cómoda. El jacuzzi muy moderno y genial para relaj****. La decoración en torno a la temática del vino es de 10, pero sin duda lo mejor de todo es que no se oye ni un ruido dentro de la habitación por lo que se descansa muchísimo. El spa también merece la pena aunque en las fotos parece más grande. El desayuno para celíacos es lo único mejorable ya que la opción que tienes es que te hagan pan para tostadas y que te saquen cosas directamente de cocina, a mi me sacaron huevos y bacon. Añadir un corner o una mesita sin gluten cuando avisa un celiaco que se va a hospedar no sería muy complicado y tener galletas, cereales o magdalenas que se pueden comprar en cualquier súper mejoraría la experiencia sobre todo si hay niños de por medio. En definitiva, si te gusta el vino, necesitas descansar, dormir y comer bien, este es tu sitio.

*(Circuito de SPA, Habitación con bañera de hidromasaje y cena a la carta en restaurante )* Ya habíamos estado una vez y nos gusto, así que repetimos, como solemos hacer cuando un sitio nos gusta. Pero no sabíamos que está vez íbamos a vivir Una MUY MALA EXPERIENCIA, reservamos habitación con bañera de hidromasaje (también existe la posibilidad de otras habitaciones más económicas que no tiene ni jacuzzy ni bañera de hidromasaje) pero nosotros, buscamos precisamente que tuviese está característica con la intención de darnos un baño caliente y relajarnos, SORPRESA nos encontramos con el AGUA FRÍA . Avisamos a recepción y nos responden que mandarán a un técnico de mantenimiento para que verifique a ver si estamos en lo cierto, para empezar ya nos sentimos ,que nos ponen en duda... Llega a la habitación un chico que se supone que es el técnico de mantenimiento y digo que se supone, porque, también trabajaba de camarero en el restaurante, la situación fue super incomoda, nosotros en batín y ropa interior esperando a que un chico abriese y cerrase el grifo varias veces, nos dice que debe ser porque hay una burbuja en las tuberías, sin aportarnos ninguna solución al problema. Así que le explicamos que precisamente nuestra reserva en su hotel fue con la intención de disfrutar de un baño caliente en la habitación y en el Spa , por lo que le proponemos ,que porfavor nos de otra habitación para intentar paliar el problema, nos da otra habitación, y sin agua caliente también. Tengo que explicar que el circuito de SPA, fue otro suplicio de agua fria y saturación de gente, ya que metieron a las misma hora a varias parejas, así que nada relajante y que salimos de allí destemplados porque los chorros salían con agua fría también. Pusimos una reclamación para expresar nuestro descontento, se entretenían a darnos explicaciones, sin ningún tipo de empatía con nosotros. Los precios de este lugar no van acorde con su nivel de trato al cliente. POSITIVO, La decoración está mimadisíma en todos los rincones de las habitaciones y del Spa, sus vinos son básicos comerciales. No lo recomiendo, hay lugares mejores!

Tercera visita en poco más de dos meses estando a 600km…creo que es motivo más que suficiente para dar crédito a mi opinión. Hotel muy muy muy cuidado en todos sus detalles, decoración e instalaciones preciosas, originales y decoradas con muy buen gusto, todo ambientado en la pasión de sus dueños: el vino y su tierra. Nada que objetar en ningún aspecto, tanto hotel, como bodega, spa y restaurante tienen un 10, por no hablar de la calidad de sus vinos. Recomendable 500%. Nosotros seguiremos volviendo, tanto es así que el regalo de cumpleaños de mi mujer va a ser entrar en el club de amigos de la bodega. Espero que le guste e ilusione tanto como a mi

Una de las mejores experiencias . Una buena visita de la bodega y su graciosa guía, buena gastronomía, relajación en un buen spa y buen descanso en habitación, bien decorada, cómodas y relajantes. Un 10 . Seguir así. Volveremos.

Nos sorprendió el derroche de imaginación de las habitaciones, merece la pena la cata(gracias Andrea), buen menú castellano, y buen desayuno. Nos atendieron estupendamente. Muy recomendable para ir con amigos y descansar.

Hemos repetido y será vez en familia. El SPA muy bien, la habitación con decoración especias, el restaurante muy bien y el desayuno espectacular. Tanto el personal de recepción como el del bar super atentos y siempre dispuestos a ayudar. Volveremos

Desayuno Buffet corto para un cuatro estrellas pero correcto. A destacar el zumo natural recien exprimido de naranjas de buena calidad. Restaurante que ofrece menús especializados en la gastronomía de la zona. Buen lechazo. Habitaciones decoradas de forma original y curiosa, ámplias y con camas de buen tamaño. La situación de algunas habitaciones ubicadas sobre la terraza exterior del restaurante del hotel, hace que el ruido y los gritos de algunos comensales afecten negativamente al relax-sueño de los ocupantes de las habitaciones que tienen balcón o ventana a pocos metros. En dos ocasiones nos encontramos moscas en la habitación, algo impropio de un hotel de 4 estrellas. Con unas habitaciones tan bien decoradas, deberían controlar y mejorar el mantenimiento de las habitaciones, estuvimos en dos habitaciones diferentes, en una la tapa del bidé está desencajada, en otra el colchon estaba deformado por el uso, el surtidor de la ducha le faltaba una pieza y la nevera no funcionaba. Un hotel con Spa debería tener "packs" o condiciones especiales para los clientes alojados en el mismo hotel.

Si no puedes dormir, no merece la pena. El lugar es bonito y esta cuidado. Pero hay música en la calle y no pudimos dormir hasta las 4:00 de la mañana. Lo comentamos en la Recepcion y nos indicaron que el ruido no era dentro del hotel por lo que no podían hacer nada. Vamos que parece que les dio igual.

Lo tiene todo y de CALIDAD. Las habitaciones espectaculares muy limpias y modernas, ambientadas en la zona sin estar muy recargadas. El restaurante perfecto para comer , cenar o tomar unas tapas, todo de calidad y a un precio muy razonable. Destacaría las carnes. La bodega es quizás lo que menos destaca ya que es una visita sin más a una bodega moderna que no tiene el encanto de otras bodegas más antiguas. La cata si merece la pena probar sus diferentes vinos , algunos de ellos de gran calidad Ribera de Duero. El entorno muy tranquilo y silencioso para poder descansar. En definitiva un hotel para pasar un precioso fin de semana.