Hoteles cerca del Rumplmayrkreuz, Rosenau Am Hengstpass

5 estrellas se encuentran en la situación: un hermoso panorama de montaña cerca de la pluma. Pero eso fue también con impresiones positivas, el resto fue una decepción. Las habitaciones son minimalistas/espartanos - ni siquiera un refrigerador vacío/minibar se ha perdido en la habitación. Las habitaciones recuerdan más a una sala de 1o grado que a un hotel de calidad. El spa con piscina pequeña, sauna y baño de vapor sería bastante agradable si se sirviera. Creo que los niños pequeños con pampers no han perdido nada en el área de sauna. Ni siquiera nadie viene a un paseo de control durante toda la tarde para limpiar el suelo de la suciedad (barras de pelo, .......). En mi observación a la recepcionista, que en mi opinión el baño de vapor no está bien configurado (intervalo extremadamente largo entre la puesta en marcha del vapor), ella sólo dijo: hay un botón para apagar y el maestro está en el Por supuesto, no hay nadie allí durante el fin de semana. Sin embargo, la mayor decepción fue el restaurante. Se pide a los huéspedes que anuncian en la recepción si quieren cenar. Lo hice. Después de sentarme en la mesa 15 minutos sin poder hacer una orden, oí que una pareja me quejó en la mesa de la otra que esperaban por su comida durante 45 minutos (después de la orden). El camarero se refería a ello. Lo siento, no hablo alemán! Después de haber salido del restaurante, me fui al centro de la ciudad a comer. Voy a viajar al menos 150 días al año (internacional) y no recuerdo cuándo encontré la última vez que encontré un hotel tan débil 4-Sterne.

Alles in ORDNUNG!! Ich will Keie Person hervorheben, denn es waren ALLE sehr freundlich und HILFSBEREIT!!! Von SA auf SO war Ich der einzige Gast, es wurde NATÜRLICH KEIN Buffet hergerichtet! Das war mir KLAR!!!!! Aber Ich bekam ALLES nach MEINEM Geschmack!!!! Ein HOCH an das Team!!!!!! Ernst

Verkehrsgünstige Lage, 600 m zum Bahnhof, in wenig attraktiver Umgebung. Sehr saubere, modern und nüchtern eingerichtete Zmmer. WLAN im Zimmer ist ungenügend: schwaches Signal und (vermutlich) zu schwacher Switch führen zu nervigen Timeouts bei WLAN-Benutzung. Der Kauf eines einfachen ÖBB-Billets via ÖBB-App erwies sich zeitweise als unmöglich - im Korridor (!) mit Glück doch noch etfolgreich. Seitens Trip wurde (wenn auch erforglos) versucht, das Kundenproblem zu beheben. Eine zusätzliche Schwierigkeit besteht in der permanent nicht-besetzten Rezeption: der Hotelbetreiber glänzt durch Abwesenheit und Nicht-Erreichbarkeit, er entzieht sich eigentlich der Verantwortung dem Gast gegenüber.