Usuario invitado
6 de mayo de 2023
Una experiencia muy negativa. En cuanto a la habitación estaba correcta, limpia y bien equipada, aunque las toallas tenían boquetes, cosa inaceptable por el precio de la habitación. Pero lo peor no ha sido esto, sino el ruido a partir de las seis de la mañana y gritos en el pasillo que no nos han dejado descansar. Estábamos en la primera planta, por tanto es imposible que la recepción no lo escuchara y ya que tuvo que abrir la puerta a tales impresentables. Además de gritos, arrastraron muebles, música a todo volumen, portazos y lo más sorprendente que nadie les llamó la atencion. Salimos a las once de nuestra habitación ya que era imposible estar allí, y la música seguía a todo volumen.