Hoteles cerca del DITIB Moschee - Ebersbach/Fils, Ebersbach An Der Fils

Ich möchte meine Erfahrung mit dem Seminaris Hotel Bad Boll teilen, das ich für eine kulinarische Reise gebucht hatte. Die Buchung erfolgte über mydays und beinhaltete eine KULINARISCHE REISE inklusive Frühstück für insgesamt 249 Euro. Leider verlief der Aufenthalt nicht wie erwartet und wir waren am Ende enttäuscht über das Angebot und den Service. Bei der Ankunft im Hotel wurden wir darüber informiert, dass das ursprüngliche Angebot nicht möglich sei, da das Hotel angeblich ausgebucht war. Statt dessen wurde uns das ”Hotel Buffet” als Alternative angeboten, das zusätzlich 29 Euro pro Person kosten sollte. Nach einer sechsstündigen Anreise und hungrigem Magen entschieden wir uns schweren Herzens, das Buffet zu nehmen. Doch die enttäuschende Auswahl und Qualität ließen uns fragen, ob es das wert war. Das Buffet bestand aus Bratenstücken, Backfisch und Käsespätzle. Die Salatbar bot Gemüse von zweifelhafter Qualität, das eher sauer als frisch schmeckte. Als Nachtisch gab es lediglich einfallslosen Milchreis und Kuchen. Für Kinder gab es noch nicht einmal eine abwechslungsreiche Option - nur Ravioli. Der Essensaal, der eher wie eine Kantine wirkte, wurde mit einer anderen Familie geteilt, obwohl uns zuvor gesagt wurde, dass das Hotel ausgebucht sei. Das wirkte auf uns seltsam und wenig professionell. Da wir eine kulinarische Reise gebucht hatten, beschwerte ich mich natürlich an der Rezeption. Ein freundlicher Mitarbeiter versuchte, uns mit Angeboten für das Parkhaus und das kleine Schwimmbecken zu besänftigen. Doch das war nicht das, wonach wir gesucht hatten. Unsere Erwartungen waren nicht mit Parkgebühren oder Freizeiteinrichtungen verknüpft, sondern mit dem kulinarischen Erlebnis, das uns versprochen wurde. Daher bestand ich darauf, das zu bekommen, wofür ich bezahlt hatte. Am nächsten Tag verbrachten wir die meiste Zeit außerhalb des Hotels. Nach den beiden Übernachtungen fragte ich beim Auschecken nach dem Stand meiner Beschwerde. Doch zu meinem Bedauern geriet ich an die Empfangschefin, die gestresst und unprofessionell wirkte. Im Gegensatz zu dem freundlichen Mitarbeiter zuvor zeigte sie keine kundenfreundliche Einstellung und wies uns stattdessen die Schuld zu. Sie behauptete, wir hätten uns erneut an die Rezeption wenden müssen, um das Grillbuffet am Samstag zu erhalten. Doch das war keine Option für uns, da wir den Samstag bereits anderweitig verplant hatten und wir uns bewusst für die kulinarische Reise entschieden hatten. Was mich besonders enttäuschte, war die mangelnde Kommunikation und die fehlende Bereitschaft, das Problem angemessen zu lösen. Es schien, als ob die Beschwerde nicht ernst genommen wurde und uns keine angemessene Entschuldigung oder Wiedergutmachung geboten wurde. Stattdessen wurde uns noch einmal gesagt, dass wir das ”Hotel Buffet” für 29 Euro pro Person hatten, als ob dies eine akzeptable Alternative für das eigentliche Angebot gewesen wäre. Die Zimmer im Seminaris Hotel Bad Boll waren zweifellos schön und sau

El ”nuevo” Leonardo se ha vuelto muy bonito. Todo muy moderno y tan saboroso diseñado y decorado. Las habitaciones son espaciosas y ofrecen todo lo que se espera. Teníamos una habitación en la calle y (debido a las ventanas silenciosas) No es nada de eso; en verano, seguro que será diferente (en la ventana abierta). La cama tenía un matraz continuo y (sólo un!) cubierta; a algunos les gusta, para nosotros no era nada! Baño OK, recepción de internet suficiente. desayuno variado y bueno. De la cercana casa de estacionamiento público (13 € por día) se puede llegar a la recepción - pie seco - a través de la silla de ruedas. personal amable y conveniente. sin restricciones ¡Es recomendable!

Para empezar: ¡verifique la descripción cuando vienes por coche, el estacionamiento está en la Geislinger Strasse 21 (entra en tu sistema de navegación), no en la Grabenstrasse! El hotel está situado en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la El hotel está en una zona de gran calidad, pero no se puede hacer nada. La habitación era el típico estilo de HIE, no hay sorpresas aquí, desgraciadamente esto incluye el mini escritorio, lo que hace difícil colocar un laptop y algunos papeles. El desayuno está muy bien organizado para salvar: necesitas usar pulverizador de desinfección, guantes protectores, una máscara y seguir una dirección en torno al bufete.

El hotel me dio la sensación de haber vivido tiempos gloriosos,como si alguna vez fue de cierta importancia, esto por detalles de decoración y servicios en las habitaciones que alguna vez tenían que ofrecer un mayor confort. Las dimensiones de la habitación son notables: una habitación muy grande con salón, escritorio y balcón con mesa y sillas. El estilo de la habitación y sus muebles se remiten a otros tiempos, pero todavía hoy están bien guardados, salvo la moqueta,consumida y maquillada tanto dentro de la habitación como en el corredor. El baño probablemente fue puesto en mano en tiempos más recientes que el cuarto, pero la realización se realizó con materiales muy baratos y se ve mucho;en lugar de la ducha estaba presente un baño de hidromasaje fechado y no creo que funcione. El baño fue funcional para lo que necesitaba;nota realmente negativa la falta de aspirador. Top : aparcamiento gratuito y parada del metro frente al hotel que lleva en el centro en 10 minutos. En cuanto al desayuno, había todo y para todos los gusto, aunque la calidad no me entusiasmó.

El parque privado no ha sido abierto todavía, pero no hay problema porque puedes usar el parque público de salida. Para comprar en el exterior, tiene la mejor ubicación y otras instalaciones.

En primer lugar, el hotel es moderno, limpio y mantenido. Las damas en el mantenimiento de casa son muy amables y competentes y nos sentíamos muy bien. Pero el personal de recepción es increíblemente involuntario y no muy útil, no se saluda y, en la mayoría de los casos, se vuelve a tener un ojo preguntador. No nos han informado de si y cuándo hay desayuno y dónde estacionar. Aparentemente los lugares de estacionamiento están directamente delante del hotel gratis. El desayuno buffet es bueno para el precio bajo, pero ni siquiera se limpian las tablas vacías. En conclusión: el edificio es bonito, sólo se busca servicio y servicio perdonado.