Usuario invitado
28 de diciembre de 2023
El hotel queda literal al frente de la playa, pero el oleaje es algo fuerte. Para llegar, en Palomino, por la vida Santa Marta – Riohacha, hay varias entradas para llegar al hotel, pero tengan en cuenta que hay unas mejores que otros, nosotros pasamos de largo la que Waze nos sugería, y entramos por la que parecía mejor, lo mismo para regresar del hotel a la vía. Si vas en carro debes parquearlo en la parte externa del hotel, en donde hay bastante espacio, pero deber tener cuidado de no dejarlo debajo de una palmera porque podría caerle un coco encima. El hotel como tal es muy bonito, está al frente de la playa prácticamente y tiene servicios de SPA, clases de surf, bar, restaurante y realizan diferentes actividades durante la semana, como Yoga en las mañanas. Tiene diferente tipo de habitaciones, desde habitaciones compartidas (con baño compartido), hasta habitaciones privadas con ventilador de techo y la más costosa de todas, que es la suite, la cual es una habitación privada, con aire acondicionado y baño privado. Nosotros nos quedamos en una suite y todo super. La suite es como un mini dúplex, en donde en el primer piso es una sala, con escritorio y un mini refrigerador, y en el segundo piso la cama, el baño y un balcón. Lo único malo es que el segundo piso tiene un techo en diagonal y fácilmente uno se pega en todo momento en la cabeza, pero al ser un dry wall no es que uno se pegue duro. También la presión de agua de la ducha no era constante, a unas horas buena presión, a otras horas poca presión. El servicio del personal es muy bueno, son muy amables y están atento a lo que puedas necesitar. Cerca al hotel hay un gran número de restaurantes y sitios de artesanías, sobre todo, en la calla sexta. La reserva no incluía el desayuno, así que lo compramos en el restaurante del hotel, no fue tan barato, pero estuvo bastante bueno. La verdad es una buena opción para qued**** en Palomino.