Los mejores hoteles con gimnasio en Buenos Aires

La ubicacion es buena. El servicio también es bueno. Son muy útiles, especialmente para llamar a un taxi. Las instalaciones están por encima de la media.

El desayuno es muy rico y la habitación es particularmente grande, si la luz es más brillante.

Es la segunda vez que me quedo en el hotel y todo estuvo bien. La recepción con total amabilidad y rapidez en el check-in, el personal del desayuno muy cordial y atento. El desayuno completo con variedad de opciones y todo fresco, siempre con lugar disponible para sent**** con tranquilidad. En la habitación funcionaba todo bien, tanto agua como aire acondicionado. Nos toco un piso alto pero el ascensor es rapido asi que no hubo inconveniente ni demoras.

muy malo el desayuno, que fue practicamente el unico servicio que usamos ya que fuimos solo a dormir, te dan turnos desde las 7 cada una hora, nosotros fuimos a las 8 y estaba todo duro reseco, comimos solo las medialunas que eran muy ricas

Excelente ubicación para nuestros motivos de viaje. Muy buen servicio de recepción, en especial de Pablo que nos ayudó en todo momento. El desayuno es bueno y la limpieza es sobresaliente. A pesar de ser un hotel moderno, nos gustó la calidad humana. Sinn dudas que volveremos, Argentina es nuestra segunda casa.

Muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bueno muy bien muy bien muy muy muy muy bien, muy bien, muy bien, muy bien, muy bien, muy bien, muy bien, muy bien.

Hay seguridad en el piso inferior, el hall está en el primer piso, el entorno es bueno, muy cerca de la Plaza de San Martin, a tres minutos a pie, hay estación de metro cerca, en general es bueno, cómodo para viajar, 40 a 50 minutos para el barco del aeropuerto

Excelente Atención y comodidad. Ubicación óptima. Cada vez qué paso por Buenos Aires con o sin mi familia, mi primera Opción es este Hotel, sobretodo por la amabilidad y predisposición de las Srtas ANDREA y LUCIA del sector de Reservas. El agradecimiento de siempre.

Estuve por el LOI SUITES RECOLETA BUENOS AIRES desde el 29/Marzo/2022 hasta el 31/Marzo/2022 alojado en una habitación cuyo costo noche era de más de USD.150.-. La mía era una suite tipo gemelas con la puerta divisoria entre las 2 habitaciones. Tal situación no me incomodó dado que supuse había alguna separacion insonora..Pues bien el huesped que se alojó en la suite de al lado era muy ruidoso escuchándose en mi suite desde la TV, Radio y hasta los ruidos propios del uso del baño. Así las cosas llamé a la recepción para: 1) Me confirmen si había alguna cuestión que neutralice o mitige los ruidos a lo que me contestarion que SÍ; y, 2) Que por favor conversen con el huesped para pedir que no haga ruidos molestosos. Fue una mucama para abrir la puerta separadora y era puerta contra puerta es decir no había NADA que neutralice ruidos y vaya sorpresa el MALEDUCADO de al lado no estaba en su habitación por cierto SIMPÁTICA la situación. En fin TENGAN CUIDADO Y GUARDEN ATENCION, lo vivido fue lamentable una total falta de cuidado al huesped. Lo curioso fue que quién me atendió ante mi reclamo me dijo: HAY QUE APRENDER A CONVIVIR SOCIALMENTE. No se si es para llorar o reir, yo gestióno en demasia mi convivencia sana con mis prójimos el tema es que el LOI SUITES DEBE PREOCUP**** DE CUIDAR EL RUIDO ENTRE HABITACIONES GEMELAS CUANDO TAL SERVICIO NO ES CONSUMIDO ASI DE SIMPLE TODO LO DEMAS ES UN DISPARATE JUSTIFICAR.

Nos alojamos en la habitación 909 en Noviembre de 2022. Para comenzar fue un tedio estacionar el automovil en el estacionamiento del hotel muy cercano al obelisco porteño. Es super incómodo, lento y complejo fundamentalmente por los espacios tan reducidos, brinda inseguridad incluso el montacarga. El huesped ya se lleva un mal trago solo al ingresar con su auto al hotel. La recepción del hotel está bastante bien para ser un hotel de 3 o 4 estrellas, muy década de los ´90s. Si bien la atención del frontdesk fue cordial, la relación calidad-precio por noche en una doble es de apróx. 170 dólares americanos, en pesos argentinos unos 26.000 pesos en ese entonces. La habitación que nos asignaron fue de medio pelo, muchos detalles en los pisos y paredes. Si bien el baño es amplio tiene detalles desagradables a la vista como una ventana ciega, un barral de ducha oxidado y flojo. Detalles que hacen la gran diferencia en servicio. Lo mejor fue el colchón/sommier de esta habitación, tuvimos una buena calidad de descanso esa noche. Utilizamos la piscina de la terraza, el agua estaba turbia ese día y con bastantes bichos. Estimamos se ensucia de esa manera por el bajo mantenimiento de las plantas exteriores que estan cerca del solarium de la piscina. No se entiende como no controlan algo tan esencial y de tanto uso por los huéspedes. Verdaderamente no llevamos un mal gusto con este hotel, no volveríamos ni tampoco recomendaríamos visitarlo por todos los motivos que he detallado en este review.