Hotel ibis Bragança

Muy sencillo e instalaciones viejas,,,

Es un Ibis. Es decir, cumple pero con lo mínimo. Lo utilizamos para dormir y nada más y para eso sí sirvió pero, para cenar algo, no. Supongo que no les saldría a cuenta pero la cocina la tenían cerrada para cenas ese martes. Cenas o un bocadillo, podías timar unas patatas fritas de bolsa. La cama era rara con un colchón y como una especie de colchoneta o similar sobre ella. De todas formas era cómoda.. Tampoco era demasiado amable el recepcionista, que te hacía sentir como si estuvieras molestando, aunque sin llegar a ser grosero. En definitiva, nada especialmente mal ni nada que destaque para bien.

Hotel muy básico y sencillo. Algo alejado del centro. Útil para pernoctar, sin más. Atención del personal correcta. Sólo nos ofrecieron desayuno. Fácil para aparcar sin pagar. En todo caso volvería yendo con coche. El centro, en coche, está a pocos minutos.