Hotel Alda Palacio Valdés(Hotel Alda Palacio Valdes)

Habitación en último piso con ventanas velux ,hacia muchísima calor en ella cuando llegamos. Con el aire acondicionado bien. Un único enchufe en una cama de matrimonio con dos mesitas, otro en la puerta y otro en el baño....un engorro para cargar dos móviles por la noche.

Ubicación perfecta, limpio y actualizado, muy buena la instancia en este hotel, personal muy amable.

Todo bien.

Habitación en planta primera. Se perciben los ruidos de tráfico del exterior por mala hermeticidad de las ventanas y por tener vidrios de escasa amortiguuación (se hace necesario revisar la carpintería y poner triple vidrio con doble cámara. La mesa es muy escasa para trabajar. La situación es muy buena

El hotel es moderno, limpio y agradable, pero especialmente el personal fue muy amable con nosotros. La habitación sencilla y comoda, el desayuno sencillo pero bueno. Sin embargo, la ciudad de Avilés es extraordinaria y merece una visita por si misma. Lo menos interesante es ral vez el centro Niemeyer. El casco historico es de una gran belleza y muy amable para camin****.

Lo mejor del hotel es la ubicación, en el pleno centro, junto al ayuntamiento y con todos los servicios disponibles. También tiene parking justo al lado del hotel, en la misma calle, por un precio diario de 14 euros. Las chicas de recepción son muy majas y atentas. La habitación no tiene nada del otro mundo, todo lo necesario y sin lujos. Lo único que puede resultar molesto si buscas algo tranquilo, es que si te tocan las habitaciones que dan a la calle, vas a estar escuchando los coches que pasen sin parar, y alguna que otra voz. Le damos las 5 estrellas porqye cumple lo que promete. Volveremos!

Cama de gran tamaño y colchón muy cómodo. El personal del hotel es amable. Desde el balcón de la habitación se puede ver el Centro Niemeyer. La ubicación es excelente: céntrica y en una zona tranquila.

Nos alojamos en este hotel una amiga y yo. En general muy bien. La atención y el trato genial, mi amiga tiene varias intolerancias y estuvieron pendientes de ella los tres días en el desayuno. La habitación que nos tocó era un poco pequeña pero bien, ya que sólo estuvimos allí para dormir. La única pega fue que nuestra habitación daba a un patio interior y las vistas que teníamos eran las calderas del hotel. Sacando esto, lo demás muy bien.

Muy bien situado, instalaciones correctas y personal amable